Esta es la época en que estos juveniles, que han echado a volar en verano, se dispersan y abandonan los dominios paternos, ya que tras abandonar el nido permanecen con sus padres por espacio de 2-3 meses. ¿De dónde puede proceder este águila real? Seguramente de alguna de las parejas ubicadas en el núcleo centro occidental de la zona asturiana de la Cordillera Cantábrica, entre los concejos de Lena y Somiedo. Aquí se reproducen unas 7 parejas de las 25-30 que lo hacen en Asturias.
Aunque en esta época de dispersión es normal ver águilas reales fuera de sus áreas de cría, en especial jóvenes o inmaduras, no lo es que lleguen tan al norte como ésta. Durante casi todo el rato que la observé fue duramente acosada por un grupo de 3-4 cornejas, que le dieron bastante la lata, a pesar de la evidente diferencia de tamaños.
Las águilas reales que crían en la Península Ibérica y norte de África pertenecen a la subespecie homeyeri, diferente de las demás que se reparten por el resto del mundo, ya que es un ave muy cosmopolita. Este núcleo engloba entre 1500 y 2000 parejas, que están bastante aisladas de otros núcleos poblacionales de la especie.