Aimee Mullins nació sin los huesos peroné en ambas piernas.
Cuando Aimee Mullins contaba con tan sólo un año de edad tuvieron que amputarle ambas piernas a la altura de la rodilla. Pero ella nunca se dio por vencida.
Aimee Mullins se convirtió en una de las mejores atletas de la universidad y compitió con el resto de los atletas. También participó en los Juegos Paralímpicos de Atlanta de 1996.
Aimee Mullins ha participado en un par de películas, ha tenido alguna realizado algún trabao como modelo y trabajó durante una temporada en el Pentágono.
Tiene doce prótesis de piernas, que utiliza según la ocasión.
Todo un ejemplo de superación.