Por Hogaradas
Mirando las fotos de nuestra boda pienso en lo que darнa por volver a vivir otra vez la magia de aquel dнa, por disfrutar de un sol que brillу mбs intensamente que nunca, de esa alegrнa que desbordaba todo y a todos, y sobre todo, de quienes nos acompaсaron con tantas y tan buenas sonrisas y que hoy algunos de ellos, desgraciadamente, ya no estбn entre nosotros.
No sй si es que el otoсo se acerca a pasos agigantados y estб consiguiendo ya alcanzarme, o que siento que me voy haciendo mayor, o que la vida y sus circunstancias, poco a poco y aunque parezca que no, van haciendo mella; no sй que serб lo que sucede, pero lo que es cierto es que me basta una simple mirada a una de esas fotos para llenarme de melancolнa, de una cierta dosis de tristeza y de unas ganas enormes de hacerme dueсa de la mбquina del tiempo, coger con fuerza su manivela y no dejar de girarla una y otra vez hasta conseguir volver a revivir aquel dнa.
El tiempo pasa demasiado deprisa para mi gusto, tan deprisa que creo que a veces no somos conscientes de que sucede asн, a menos que hagamos lo que esta tarde me he dedicado a hacer yo, viajar por unas fotografнas, por unos rostros y por unos paisajes que aunque nos cueste creerlo y nos duela, han cambiado ya de color y nunca jamбs volverбn a ser los mismos.
A tan solo un mes de nuestro aniversario nada puede ser mбs distinto de lo que me imaginaba, aunque lo esencial, el amor, sigue habitando nuestra casa, quizбs ahora, aunque cueste creerlo, con mбs intensidad que nunca. Pienso que al fin y al cabo eso es lo mбs importante, percibir esa compaснa, esa mano que sujeta la tuya, ese hombro en el que apoyarse y ese abrazo que de pronto, y sin pensarlo, recibes, y que sientes tan, tan fuerte, que incluso si se prolongara demasiado, conseguirнa hacerte llorar.
El poder de un abrazo, de una caricia, de un beso, el poder del amor al fin y al cabo es lo que nos hace seguir adelante, porque ese proyecto en comъn sigue en pie, firme como una roca, y porque pase lo que pase y por muy fuerte que sea el temporal, si somos dos, y estamos unidos, seguro que todo resultarб mucho mбs fбcil.
Aquel dнa, creo que ya lo he expresado en alguna otra ocasiуn, fue un dнa de los mбs hermosos de mi vida, ъnico e irrepetible, como todo lo bueno, como la vida, que nos regala cada segundo para que lo disfrutemos y lo devoremos como si fuera el ъltimo, aunque a veces no consigamos apreciar que se nos estб escapando entre los dedos sin que nos demos apenas cuenta.
Por eso ademбs de vivirlo, intentemos prolongar mбs el placer que nos produjo haciendo esto, recordбndolo, cerrando los ojos, y en mi caso hoy, para verme de nuevo como esa novia radiante de aquel dнa, rodeada de todos, salpicada de granitos de arroz, al calor del sol, del sonido de las gaitas, de los besos, de los abrazos, y sobre todo, de lo mбs importante, al calor del amor.