Inglés y niños.
Todos somos muy conscientes de la dificultad que tiene el desarrollar un idioma. Y como habremos oído una y cien veces, si quieres hablar inglés bien, tienes que ir a vivir al Reino Unido. Esto es debido al sistema educativo y la forma en que nos enseñan los idiomas, además de a que edad se empiezan a aprender. Por otro lado, tenemos casos muy curiosos en los que niños de menos de 3 años, son capaces de entender y hablar 2, 3 idiomas, sin ninguna complicación. Lo que nosotros hacemos es fijarnos en el proceso natural, que hace que niños de 3 años hablen inglés mejor que jóvenes que han estado estudiando el inglés durante años y años. Nos encontramos que es tan sencillo como mantener un ratio de escuchar inglés (a personas, la televisión no vale. Puede ayudar, pero no va a conseguirlo ella sola. Digamos que puede ser un complemento.) Si somos constantes y nos organizamos los temas o lecciones que les vamos introduciendo en inglés y muy repetitivos. conseguiremos que los niños desarrollen una capacidad, que aunque hablen en mayor o menor medida el inglés. Lo que estamos haciendo es sentar las bases para un futuro. Los niños tendrán una predisposición para hablar idiomas como el inglés, o cualquier otro idioma que le introduzcamos.
Los niños suelen pasar mucho del tema del inglés. Y los colegios no ayudan mucho. A pesar de que en los últimos años, los padres parece que nos hemos vuelto locos con el idioma. Queremos que aprendan bien, algo bueno. Pero, no sabemos a que precio lo estamos haciendo. Los padres suelen presionar demasiado a los niños diciéndoles la importancia del inglés en la vida… cosas que los niños no entienden. Debemos tratar de conseguir que el niño sienta esa responsabilidad y sobre todo la importancia que tiene el inglés en sus vidas. Pero, por mucho que le repitamos y le pongamos delante del libro. O le pongamos en su rato libre de tele sus dibujos en inglés. Todo esto lo que hace es que el niño se sienta intimidado y le supere. Nuestro cerebro está preparado para aprender varios idiomas de forma totalmente natural hasta los 3 años de edad.
Y tenemos muchas formas de motivarle. Contrata a una chica nativa para que le cuide unas horas y que no hable en español, y si lo hace que no lo haga nunca delante del niño. En este caso el niño no debe saber que es para aprender inglés. Sino que es para jugar con ella. El niño no se sentirá que está estudiando todo el rato. Tan solo está jugando con una chica que por desgracia no habla español. El niño de esta forma se mostrará totalmente natural y lo que es más importante no cogerá odio al inglés. Algo que nos estamos encontrando cada vez con más asiduidad.
Juegos de colegio.
Como acabamos de decir, el aprendizaje del inglés de forma natural es la clave cuando tratamos con niños de menos de 5 años. Una vez que pasamos esa frontera la cosa se vuelve más peliaguda. Aunque aun estás a tiempo de conseguirlo con un poco más de esfuerzo. La actividad con más capacidad para la memorización y el entendimiento de cualquier tema es el juego. Y aquí no me refiero en los niños pequeños. Esto es así para niños y adultos de todas las edades, incluso ancianos. El juego consigue que nuestro cerebro se involucre de una forma totalmente diferente a la actividad o ejercicio que estamos haciendo en cada momento. Aunque es una teoría que en verdad se ha demostrado en cientos de estudios realizados. A la comunidad educativa y a los colegios les cuesta mucho basar ninguna parte de la educación en los juegos. Ni siquiera una asignatura de prueba para ver cuales serían los resultados en una educación basada en el juego.
Uno de los mayores problemas de los juegos para enseñar inglés. Es que con los años, hemos perdido toda la creatividad. Con lo que nos limitamos a hacer los mismos juegos una y otra vez. Y no nos damos cuenta, que cualquier actividad realizada con un toque de humor, de libertad y con unas pautas fáciles se puede convertir en un juego. Para enseñar inglés en casa o en el colegio, debemos tener unas ideas muy claras de los temas que vamos a ir tocando. Pero, luego dentro de unos limites debe ser todo improvisado. Así si vamos con el niño un día al hospital, es una buena forma de enseñarle los elementos del hospital. (Me centro más en el vocabulario, ya que los niños tan pequeños, no necesitan saber las normas gramaticales en inglés para hacer las frases bien. Ya que no sabrán por que se forma así, pero saben que se dice así. Entonces dividimos la materia en áreas de conocimiento. Para facilitar el aprendizaje de los niños de colegio o guardería.
Un juego divertido para hacer cuando enseñamos los elementos del colegio, es crear nuestro propio cole en casa. Así por ejemplo ponemos una cartulina negra que será el encerado, una papelera, una mesa, todo lo que se nos ocurra, para que se parezca al colegio. Mientras tanto vamos repitiendo una y otra vez los elementos que el niño dice que podemos poner.
Una vez que tenemos el aula del colegio. El niño puede realizar juegos de imitación, haciéndose pasar él por el profesor e imitar la clase que le han dado sus propios profesores esa mañana. Mientras el niño tiene que utilizar los elementos que le hemos enseñado.
Si queremos podemos ser el alumno, y le tenemos que decir palabras en inglés del colegio, y el niño tiene que reconocerlas según está hablando. Todo lo que se nos ocurra que divierta al niño y que tenga algo de inglés. Nos ayudará y al niño le encantará.
Y el vídeo.
Y como decíamos al principio, también tenemos un vídeo educativo pensado para niños de guardería y de colegio en el ciclo de primaria. Donde tenemos diferentes elementos que podemos encontrar en un colegio. Y a la vez que tenemos la imagen o dibujo en la pantalla, también escucharemos la pronunciación en inglés de la palabra.