Al descubierto millonario negocio de la Familia Castro – Soto del Valle

Publicado el 06 febrero 2017 por Yusnaby Pérez @yusnaby

La decisión de no venerar al dictador cubano Fidel Castro ni de nombrar ningún espacio público con su nombre es una de las maniobras de sus descendientes para lucrar con la imagen de Fidel con el ilegal respaldo del régimen.

Una de las empresas más lucrativas en este sentido, la dirige  Alexis Castro, uno de los hijos del ex dictador cubano.

Parece una ingenuidad, hay que detenerse en los detalles para entenderlo, pero el negocio es altamente lucrativo. Resulta que la descendencia de Fidel es la encargada de la producción y venta de pulóveres para sus continuas campañas y marchas políticas.

Las ganancias eran millonarias incluso desde antes de la muerte de Fidel. Después de su deceso, obviamente se han multiplicado. El propio funeral organizado durante 9 días en la isla garantizó ingresos millonarios para los dolientes-negociantes hijos del dictador.

Miles de camisetas blancas con el rotulo YO SOY FIDEL inundaron la isla. Millones de personas en La Habana, Santiago de Cuba y toda el país las usaron como parte de los homenajes. Otros cientos intentan conseguirlas ahora. Miles de turistas que convierten al sepulcro del dictador en atractivo turístico las compran sin chistar.

Lo mejor del caso es que aunque el producto en sí es caro y  de mala calidad, todas las empresas cubanas que lo venden oficialmente están obligadas a comprarlo a 3 dólares.

Si multiplicamos estos 3 dólares por la cantidad de personas que lo usan en cada una de las movilizaciones podemos deducir que la cifra es millonaria.

La mejor parte de la historia es que la pequeña y desconocida fábrica que produce esta estafa textil se encuentran ubicada en Punto Cero, muy cerca del último refugio de Fidel Castro.

Sus costos de producción se desconocen porque en ella trabajan militares del régimen no pagados, lo que hubiese llamado Fidel despectivamente en sus tiempos de furia contra el imperio: “mano de obra barata”, sólo que aquí no es ni siquiera barata, es mano de obra esclava y de verde olivo.

Alexis Castro, hijo de Fidel Castro, es el dueño de esta empresa completamente ilegal y legal a la vez, una iniciativa salida de las entrañas de un monstruo del que conocemos sus entrañas.

Con información de Martí Noticias.

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