La preparación de una deserción de un capitán de un barco de pesca en Corea del Norte parecía rozar la perfección. El arranque y la huida hacia el sur también parecía ir de forma correcta. Sin embargo, la suerte dejó de asomarse cuando los problemas mecánicos surgieron en medio del mar y por consiguiente, se ha derivado en un futuro que será devastador.
Enlace: Al final, la suerte no le llegó al capitán El diario de Corea del Norte