Al segundo amor.

Por Tayi Tayi Fonseca @TayiFonseca

Te amo. Te amo como jamás quise en mi vida.

Te amo como si las palabras pesaran lo suficiente como para no poder pronunciarlas.

Te amo como a mi soledad al desayuno y la compañía en la cena.

Te amo tanto que podría dolerle al alma, te amo como jamás te lo he dicho.

Te amo como a la sonrisa que no conocía y a la ansiedad que en mí más odio.

Podría amarte hasta las mañas, todas las ganas y las mañanas. Te amo al caminar porque en alguien jamás encontré un pisar tan firme.

Te amo que podría llegar a odiarme por haberme enamorado.

Te amo hasta en la sombra y las mentiras, hasta el límite de mis discusiones y el terror del no tenerte.

Podría amarte mi vida entera, en la vejez y sin planes.

Te amo como a las rosas, de tanta belleza les tengo respeto que llegue a odiarlas de envidia.

Te amo como nunca jamás lo he pronunciado.

Podría amarte tanto como amo al mismo Dios, a quien temo, creo y nunca miro. Te amo al hablar, te amo al conversar, te amo como nunca pude haberle dicho a nadie una sola palabra, como a mis mismas lágrimas de orgullo.

Te amo como el frío con lluvia ligera. Como el sol cuando atardece y se despide de la luna hasta un nuevo amanecer.

Podría amarte hasta en mis angustias, en mis ternuras y mis rarezas.

Te amo como mi mismo odio a los abrazos, te amo como al verde de mis ojos, el café de mis tardes y el té que nunca he disfrutado.

Te amo tanto como nunca te lo he susurrado.

Te amo como a la soledad que siento y a la zozobra de no tenerte jamás. Te amo tanto que podría compartirte, olvidarte y nunca recordarte, excepto los días en los que amanezca un nuevo día y el mismo Sol te recuerde en mi.

Podría amarte lo suficiente como para olvidarte, encontrarte en mi de nuevo y buscar la razón de mi amor.

Te amo tanto como lo mucho que espero olvidarte.

Te amo. Como nunca nadie podrá.