Mari Mar es una de mis mejores amigas y creo que le he inyectado el gusanillo: "segunda oportunidad".Al principio maquinabamos juntas los apaños, ahora ya licenciada en este "reapaño" antes de dar una patada a la ropa la remira e inventa soluciones. Me ha mandado sus pinitos en un arreglo fácil, económico y resultón.
Felicidades y te espero para el cambio de temporada, ver que se nos ocurre hacer con la ropa y reestrenarla.
Tendré un cafetito preparado y la máquina de coser a punto.
Un beso enorme.