Ayer, el príncipe Alberto II y su mujer Charlene bautizaron a sus hijos, Jacques y Gabriella.
La misa se celebró en la catedral de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción, que fue decorada con 6.000 flores blancas, ante unos 700 invitados.
Los bebés, que nacieron el pasado 10 de diciembre, lucieron para la ocasión dos túnicas blancas de Dior.
Al cruzar el umbral de la catedral, sonaron 42 cañonazos, 21 para cada niño.
Fotos: RG