Estoy seguro que aficionarse a la astronomía es algo fácil, pero por desgracia nuestro sistema educativo relega a la astronomía a un segundo plano, y tan sólo iniciativas personales de algún profesor inquieto permiten acercar la astronomía a nuetros escolares.
Si al final, este proyecto se lleva a cabo, muchas de las futuras generaciones de alcalaínos seguro que se enamoran de las estrellas y miran más al cielo.