¿Qué es la alcaravea?
La planta alcaravea, también conocida como comino de prado, cuyo nombre es Carum carvi, es una planta miembro de la familia de más de 420 especies de las Umbelliferae o Apiaceae. En el caso de la Carum carvi, propia de Europa, Asia Occidental y África del norte.
Existen pruebas de su uso medicinal desde siglos remotos en Europa, y está incluso en un tratado de plantas medicinales emitido por Carlomagno en la época de su imperio. Por tanto los usos de la alcaravea son muy antiguos, y ya en España se utilizaba en recetas en el siglo XVI.
En la actualidad se emplea como condimento, con su extraña mezcla entre especia picante y anís, para saborizar quesos en Dinamarca y el norte Alemania, para crear bebidas alcohólicas, como el Brennivín o “vino ardiente”, una bebida islandesa con una graduación del 37.5%.
Para usos medicinales se emplea tanto las semillas como el aceite esencial de alcaravea y para cosmética se encuentra presente en jabones y lociones.
Propiedades de la alcaravea y beneficios para la salud
Las propiedades de la alcaravea a nivel medicinal son bastante amplias, gracias a sus principios digestivos, tónicos, analgésicos, diuréticos, antisépticos y antiespasmódicos que aportan enormes beneficios para la salud.
Es una planta rica fuente de vitaminas y minerales, como las vitaminas A o retinol, varias vitaminas del grupo B como la Tiamina o vitamina B1, Riboflavina o vitamina B2, Niacina o vitamina B3, piridoxina o vitamina B6, además de vitamina C. En cuanto a minerales, contiene calcio, hierro, magnesio, fósforo, potasio, sodio y zinc.
Su empleo abarca distintos tipos de dolencias como todas aquellas relacionadas con el aparato digestivo, ya que es efectiva para la gastritis, para las flatulencias y gases, a los cuales ayuda a expulsar, los dolores de barriga por una mala digestión, y gracias a sus propiedades antiespasmódicas es muy buena para los retorcijones de estómago, además de efectiva para combatir los parásitos intestinales. Es un excelente estimulante hepático y biliar, y resulta ser muy útil para combatir la halitosis o mal aliento de boca.
Además, gracias a las propiedades analgésicas de la alcaravea, se puede utilizar también para los dolores de cabeza, los dolores menstruales y los dolores de muelas, además de los diferentes tipos de dolores estomacales.
También se puede utilizar en infusión para tratar afecciones cutáneas como eccemas, acné, forúnculos y granos.
Semillas de alcaravea
La semilla de alcaravea es la que contiene sus propiedades, y las infusiones y demás productos de la misma se hacen a partir de ellas. Recuerda ligeramente al comino, al eneldo y al anís, aunque su forma es ligeramente curvada en comparación con estas.
Y aunque el sabor es en parte similar al del anís, es algo más picante que esta especia.
Alcaravea como especia
La alcaravea como especia se puede utilizar para saborizar muchos platos y otras cosas, como la citada bebida islandesa o los quesos, el Tilsit y Havarti de Dinamarca y el Milbenkäse típico de algunas regiones de Alemania.
Los panes indios como el papadum y el naan se saborizan con esta especia, entre muchas otras variantes. También las patatas al horno, o la col se puede saborizar con grandes resultados, utilizando la semilla de alcaravea como especia.
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