El Food Revolution Day de este año me encontró con una cosa rara: alcauciles en otoño. El alcaucil es mi preferido. No puedo evitar verlo y comprarlo, sea la temporada que sea.
En casa siempre se comió alcaucil: de la manera más fácil y básica: hervidos, aceite, vinagre y mayonesa, y mojar las hojitas.
Además de ser delicioso, era muy entretenido comerlos. Todo un evento.
En la olla de casa entraban unos 6 o 7. Eramos 5. Imagínense como nos peleábamos por los dos extras!
Volviendo a la actualidad, alcauciles en mayo, no importó nada, y me compre dos.
Del #rainydaybitescookbookclub de marzo, me había quedado en el tintero una receta que me crucé de casualidad: simples alcauciles hervidos, con una salsita distinta.
Nada mejor que aprovechar este día de festejos en la cocina, con una receta deliciosa, y que pasa al top ten de los alcauciles.
Hay una receta!