La "Introducción" del propio Aldo Ceccato leída por el director del Conservatorio (y que recomiendo a todos los amantes de la música) explica con sus más de 40 años como director y 50 estudiando las sinfonías beethovenianas desde su "profana certeza, heredada de Wagner y Mahler", pero escucharle resultó aún más placentero y con la convicción de estar ante una auténtica leyenda de la dirección totalmente asequible a nosotros los mortales. Se le hizo entrega de la Medalla de Honor, aunque pidió que le grabasen su nombre ¡un auténtico fenómeno!.
En Málaga ya lo disfrutaron (pero creo que la orquesta se le quedaba "corta"), en Oviedo al menos nuestra OSPA sonó como nunca (¡la importancia del saber!), y las grandes formaciones mundiales son honradas con su dirección preclara. Ahora también podemos compartir su conocimiento y aportación a las sinfonías de Beethoven.