Algo preocupante se está poniendo de moda en este país. Es curioso que el periodo de alegaciones para algo tan improtante como el Real Decreto por el que se producirá la revisión del catálogo nacional de especies amenazadas coincida con el mes de vacaciones por excelencia, agosto, y, de hecho, dicha fase acaba hoy viernes 10 de septiembre. Algo tendrán que ocultar, ni más ni menos, por ejemplo en el caso de los invertebrados se han excluído de la lista a 274 especies en situación grave o muy grave. Una vergüenza, se ve que el caso canario ha creado escuela. La gravedad del asunto va más allá de la propia desfachatez del asunto, es una clara y severa agresión al estado de derecho y de los propios derechos de los que goza todo ciudadano español.
¿Y qué hacer? Pues se ha propuesto el enviar el siguiente correo a la dirección de correo electrónico participacionpublica especiesamenazadas@marm.es con el siguiente texto solicitando una prórroga de dos meses del periodo de alegaciones:
"Ante la inmensa importancia de este esperado catálogo, en el que se basará la gestión y conservación de las especies en un futuro, y ante las incoherencias y ausencias inexplicables detectadas. Solicito que se amplie el plazo de alegaciones dos meses más, hasta el 10 de noviembre.
Atenuantes: La ley que debería haberlo incluido es de 2007 (42/2007, Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad), se han tenido tres años para elaborar el Cátalogo y no puede ni debe sacarse a información pública en agosto (mes en el que la propia administración parece no existir) sin hacer difusión de la misma y con un exiguo plazo para alegar, casi rozando la ilegalidad."
Puede que ya sea tarde, pero por intentarlo que no sea.