The killers - Sam’s town
Los asesinos se ganaron un pedacito del escenario mundial con el “Hot Fuss”, que irradiaba ciertos destellos de artilugios sintéticos, refresca
Volvieron mas orgánicos, con una tendencia mas grandilocuente, de todos modos Brandon Flowers, sabe ser un predicador a la vieja usanza, pero uno fashion, y aunque a ratos “se le escapen los tarros” con unas bocanadas fuera de lugar al estilo Gallagher, cuando se dedica a los escenarios le da un variante mas lírico a su voz, logrando emocionar con facilidad, y un manejo de sintetizadores que se hermana bastante bien con la guitarra atmosférica y delicada de Keuning, la sección rítmica, esta hiperquineticamente afinada, y con dosis excelsas de coros que imitan de manera redonda, una alineación dominical de creyentes devotos.
Aunque hayan predisposiciones apáticas para con nuevas promesas que llegan vivitos y coleando solo hasta su segundo disco, es innegable el hecho que eso no necesariamente beta su capacidad de crear buenos trabajos, y la ceremonia de indios y vaqueros que convoca en esta ocasión, es un caso casi entrañable…Desde las Vegas con ambición…y en el siguiente paso natural…su accesoria buena placa, que los ratifico (y lamentablemente sobrevaloro) como un grupo a tomar en cuenta a la hora del relevo que venimos esperando hace unos cuantos años ya.
“Nunca nadie tuvo un sueño por aquí, pero realmente no me importa…”
Sam’s town es la nominada para dar la bienvenida a Sodoma y Gomorra, cual carnaval antes de una función desencaja toda una artillería variopinta para deambular mas sutilmente entre una que otra descarga de decibeles por parte de la guitarra, mas un tamboreo constante, y la voz pronunciando correctamente cada parte del dialogo entre los componentes elegidos. Enterlude, personifica la transición entre el vestíbulo pintoresco y la iniciativa bohemia, una corta duración, para anteceder esa ventisca de cuchilladas aplastantes y esperanzadoras nombrada When you were young, que vuela todo el polvo árido, a base de la unión casi predestinada de rock popero y frases nostálgicas.
“Dicen que el agua del diablo no es tan dulce, no tienes porque bebértela ahora, pero puedes mojar tus pies en ella, cuando quieras. Te sientas ahí con tu dolorido corazón, esperando que llegue… a salvarte de tus pecados”
Bling (confession of a king), entrega un horizonte entre decadencia humana, exaltando toda la pintura invertida en el panorama absoluto de Sam’s town. For reasons unkown, camina, mas bien trota, entre la vereda de la añoranza, fragilizando el paso del tiempo, y la velocidad contemplativa pero critica…caramba que dan ganas de tomar un caballo muy en la onda western. Read my mind, brilla consistente y preciosamente en lo que su duración le permite, con arreglos puntuales y un mensaje subliminal de belleza desesperada bastante épico…como unas cuantas canciones mas que se nos vendrán encima en unos momentos más. Basta creo con mencionar esas líneas cuando este orador de turno nos murmura…
“Un beso sutil que nadie ve…es gracioso el modo en el que simplemente te colapsas esperando alguna señal con la que me detenga a la entrada de tu casa, con magia empapándome la columna. Resbalo con mi fe hasta que me caigo, nunca devolviste esa llamada…no quiero respirar ese fuego otra vez…las estrellas brillan como diamantes tallados del sol, cuando tu lees mi mente”
Uncle Jonny
Este episodio es interesantísimo desde la perspectiva mas miserable, acercado a un lamento mas desgarrador y un ritmo cíclico, es intrigante cuando habla de las andanzas del Tío Jonny y su adicción a la cocaína, con tanta efectividad .. “mi apetito no tiene corazón…la levitación no es tu única amiga…sientes un ardor en el centro de tu cuerpo, es un anhelo que no puedes ignorar”
Quizás no tenga una cumbre de éxtasis pero su cometido de soledad y adicción, lo consigue diligentemente.
Bones
Esqueletos que la noche asesino se levantan para bailar la octava pista, con arreglos de viento incorporados y coros meticulosamente insertados, marcan una vibra bastante pomposa.
El video de esta parte del trasnoche, fue encargado a Tim Burton, quien consiguió con creces fabricar una maravilla bastante positiva…y que mas burlesco que calaveras cantándote en grupo… “una visión cinemática sobrevino como el sueño mas santo ¿alguien esta llamando?... siempre los oigo cuando la muerte de la noche viene llamando para salvarme…”
My list, mortífera e insípida, aletarga una transición innecesaria.
This river is wild y Why i do keep counting?, magnifican a base de epicidad y agrupaciones de voces blancas. Representan ese último aire antes de caer en el sueño etílico. Para amanecer con la despedida mas resacosa de Exiltude y decir adiós a este obstinado recorrido.
Como siempre digo, aun se pueden topar con buenos discos, al menos antes que lo popular meta sus dedos entre las creaciones, trabajo con reverberaciones mas calidas, pero al mismo tiempo representa mas crudeza, que su antecesor. Sin un rastro de duda, puedo aseverar que Sam’s town es lo mas cercano a tener en una mano la biblia y en la otra una botella de whisky y fichas de casino.
PD: el titulo que mas agringado no puede ser esta dedicado a.......(adivinen es medio obvio)