Argumento
Un misterioso circo llega a un pueblo remoto. Mientras la población se queda hipnotizada por el espectáculo tan vanguardista que se despliega ante ella, una pareja de ancianos trata de solucionar lo que es, a todas luces, un insignificante problema doméstico. Sin pretenderlo, se verán involucrados en una aventura trepidante, en una compleja trama —en la que el circo y su sibilino mánager tendrán su papel— que les llevará hasta límites insospechados.
Estructura, ambientación y estilo narrativo
La novela está estructurada en múltiples capítulos de escasa duración, algunos llegando a ser únicamente dos páginas, sin separación de partes ni numeración.
La ambientación sitúa la historia en un pueblecito sin nombre, que bien podría ser cerca de Madrid, o en los mismísimos Pirineos. La descripción de los escenarios es escasa, al centrarse la novela en los comportamientos.
Está escrito en tercera persona, con un narrador omnisciente, que nos permite ver los pensamientos y acciones de todos los personajes en cualquier momento. El estilo es sencillo pero cuidado, con fluidez de lectura que nos hace interesarnos por todo lo que pasa en la historia, por muy cotidiano que sea.
Personajes
A pesar de que esta es una novela que lo requeriría, mantengo la sección de personajes. El motivo por el que no se puede hablar de personajes es porque en realidad no lo son del todo: son reflejos de actitudes y situaciones de la vida real, llevadas al papel con un toque de humor y surrealismo para hacerlos pensar. Todos ellos carecen de nombre.
Están los ancianos, los olvidados por la sociedad y siempre son malinterpretados. Se les da una migaja y se cree que deben estar agradecidos. Luego está el alcalde, la inseguridad personificada combinada con una profesión que le hace sentir superior, ms dedicado a su egocentrismo y su imagen que a los verdaderos asuntos que debe resolver.
Por otra parte esta la oposición, que unido al alcalde, hace la combinación política perfecta: el que actúa por imagen y él se queja por tocar las narices. Y por detrás de todo ello, esta el manager, el avispado que ve todas estas cosas, y saca provecho de ello.
Eso sí, no podemos olvidarnos de lo más importante: el pueblo, la masa boba a la que manipulan, marean y se aprovechan de ella… pero que ni se inmuta porque no es consciente de nada.
Mi opinión
He decidido mantener la sinopsis que le pusieron, ya que tras leerlo y plantearme alguna descripción alternativa, me he dado cuenta que la manera más sugerente de plantearlo, además de no introducir ningún tipo de spoiler, es la que ya han hecho ellos.
Cuando la pedí a la editorial, no sabía demasiado bien que iba a encontrarme. Lo que realmente me atrajo fue el circo misterioso, que me hizo pensar inmediatamente en Carnivale (aquella maravillosa serie de la HBO que cancelaron en su segunda temporada y que me gustaba tanto).
Y si, un aire tiene a ese mundo, eliminando la parte sobrenatural que pudiera haber. Empieza con el misterio del que será, pero luego descubrimos lo triste que es el mundo y nuestra sociedad, distribuidos en borregos y manipuladores. Porque en el fondo, casi se reduce a eso.
Pero no os penséis que todo es crítico, sino que viene camuflada bajo una buenísima comedia, rozando lo disparatado y surrealista. Las escenas son divertidas y a la vez agridulces.
La historia se va enredando, pasando la pelota de los problemas de uno a otro, hasta que rompe todo y se malinterpreta hasta límites insospechados. Y cuando creíamos que no podía ser más absurdo todo (por parte de cada uno de los interesados en la historia), se enreda un poco más.
Uno de los puntos esenciales y que provoca casi todas las situaciones de la novela son los medios: manipuladores y oportunistas, subjetivos y absolutamente parciales. Pero sobre todo, trabajando para un único ideal: el dinero.
Porque en el fondo, deberíamos reírnos de los que es la gente capaz de hacer por dinero, y peor aun, que piensa que todos tienen lo mismo en mente. Ese es el motivo principal por el cual sucede todo en esta novela, y que nos da para empezar a pensar…
Es el primer libro que leo de este autor y me enamoré totalmente de su estilo. Es sencillo pero muy cuidado y yo diría que elegante. Al principio no pensé que fuera adecuado para lo que estaba contando, pero en cierta manera es una forma de favorecer más la comedia, dándole la seriedad de la narración a las situaciones más disparatadas.
Lo que creo seguro es que es imposible aburrirse leyendo la historia, y que nos hará gracia, a unos más que a otros. Porque me parece, que cuanto más parecido le ves con la realidad, más ganas tienes de llorar.
El final es totalmente impredecible, yo no lo esperaba para nada y me sorprendió muchísimo. Tendréis que verlo por vosotros mismos ¿caemos todos en la espiral del egoísmo? ¿Gana “el bien” sobre “el mal”? ¿Abrimos los ojos los borregos o nos cegamos aún más?
Yo por mi parte, he tenido que leerlo dos veces porque pensé que lo había entendido mal. Pero no… era así. Espero con esto despertaros al menos la curiosidad.
Llegados a este punto creo que casi no es necesario decir que la novela me ha encantado y la recomiendo. Quizá para leer un poco más lento, aunque enganche mucho la lectura y se haga muy fluida, merecería la pena pensar en todo el contexto y vernos (o no) reflejados en algún punto de la historia.
Sin duda, creo que pasará a mi lista de recomendados y al exclusivo TOP de este año.