El mexicano Alejandro Fernández triunfó en el Starlite Festival de Marbella ante un público mayoritariamente femenino y con mucho "sabor" sudamericano en las gradas del Auditorio de la Cantera. No llenó las gradas al completo pero sí que este ganador de dos Grammys Latinos provocó un auténtico colapso automovilístico en los accesos a Nagüeles.
No defraudó Fernández en un recital de algo más de dos horas sin apenas descanso, donde interpretó 26 canciones. Desde las baladas románticas hasta canciones más modernas, sin olvidar las rancheras y un fin de fiesta extra con canciones de su padre. El mexicano no dejó pasar la oportunidad para mostrar temas importantes de su último disco "Confidencias", coreadas a unísino por el público femenino que le idolatra.
A tener en cuenta la excelente puesta en escena de su grupo, con artistas de calidad y un imponente cuerpo de baile femenino en todos los sentidos. La "hora de México" se vivió a tope con la presencia en el escenario de una docena de mariachis, a los que acompañó Alejandro vestido de charro. La elegancia del cantante estuvo sin duda desde el primer momento del recital. La gente no quería que terminara nunca el espectáculo, lo que provocó bises y bises. Recuerdos a sus hijos, allí presentes, y a su padre desde el escenario.
En la grada estuvieron VIPS de distintos sectores como la política, el mundo del corazón, el espectáculo y las finanzas. Todos quedaron contentos con el mexicano