Las consecuencias que eso tendrá sobre muchos sectores empresariales serán enormes. Acabo de mencionar el automóvil, pero también el petróleo o el textil, el plástico, el agropecuario, la movilidad, la construcción, etc.etc.
En otro paso también mencioné el turismo.
Era algo que tenía que pasar y a lo que el coronavirus va a dar un impulso.
Qué verdad es que “no hay mal que por bien no venga”.
La recuperación económica se ha de construir sobre esas premisas. Los gobiernos, los empresarios, los inversores, los trabajadores, que se den cuenta de ellos y se apunten a esa apuesta, serán los que se recuperarán antes y mejor de el batacazo del COVID19.
Se va a imponer la tecnología y la economía circular. Será la explosión definitiva de la 4ª Revolución Industrial.