PROHIBIDA LA PALABRA: BARCELONA
En Fox ya no saben cómo hacer para disimular el disgusto que les provoca el Barcelona. No había terminado el partido contra el Chelsea que ya estaban hablando de finales de ciclos históricos. Es curioso, porque en la medida en que el equipo de Iniesta mantuviera el nivel actual, ya no hablemos del mejor nivel, seguramente continuará siendo quien jugaría todas las finales, para dolor de los comentaristas de Fox.
Posteriormente, durante el partido del Madrid contra el Bayer de Munich, el relator aseguró que el Barcelona había dejado escapar la oportunidad de jugar la final de la champions porque atacó demasiado en vez de especular cuando el partido era favorable. Claro, tiene razón, si el Barcelona, jugando como jugó contra el Chelsea, no ganó ninguna final.
ÖZIL Y 10 MÁS
Además, en fox tienen la costumbre de ver los partidos conforme a sus nulas entendederas, por tal razón eligieron tres o cuatro figuras (cosa de no errarle), y le erraron, porque la figura del partido fue el turcoalemanomerengue Mezut Özil, quien habrá errado dos pases en todo el partido, quien sólo podía ser detenido con faltas, y quien fue el desahogo constante del horrible equipo de Mou. Los de Fox eligieron a los que más corrieron, costumbre niembrista.
LA PAREIDOLIA DE LOS GOLPES EN LAS PRÁCTICAS
Por otra parte, no diré nada de la alegría que expresan en el twitter los (tres) contras de Riquelme tras haber conocido la noticia del golpe que el 10 sufrió en el entrenamiento. Son los mismos que después, desbordando buenos sentimientos, homenajean a los combatientes de Malvinas. Y los mismos que no encuentran excusas para abstenerse de elegir a Riquelme como figura en los cuartos de final de la Copa Libertadores. A esos tres twiteros y a las senhorace de la Boca les debo este blog que continúa derrapando pero que ya habrá de resurgir con todo su desencanto cuando las olimpíadas que espero ansioso.
QUERIDO MARCELO:
Por último, desear que la suerte continuara acompañando a Bielsa, quien está haciendo historia con un equipo a su medida. ¡Suerte, loco, y nunca vuelvas a dirigir la selección Argentina!.