La Rioja tiene infinidad de paisajes naturales increíbles que invitan a abrir bien los ojos y dejarse llevar por sus paletas de colores y variedad de formas. Los invitamos a dar una vuelta por ellos. Un post para leer y mirar el mapa para ubicarse.
Reserva Natural el Chiflón
El lugar donde el viento habla con quien lo quiera escuchar, como lo hacían los Diaguitas cuando recorrían estos paisajes y se detenían a fabricar sus morteros; el lugar donde se muestran los cóndores que hoy y siempre surcaron estas geoformas increíbles con un vuelo majestuoso, el lugar donde todo eso sucede es aquí: en la reserva Natural El Chiflón.
Con tres circuitos de diferente duración y siempre acompañado de un guía de la reserva, recorrer este parque de camino a Talampaya, sobre la ruta 150, no tiene desperdicio. Pude ver rocas atrapadas dentro de otras rocas, acantilados tallados por el viento, rocas con formas increíbles e incluso, los morteros que los Diaguitas cavaron para luego moler granos, además de los íconos del parque, como el Bosque Petrificado y el Hongo, entre otros.
El Hongo.
Troncos petrificados.
El Pucará.
Paredones tallados por el viento.
Morteros hechos por los Diaguitas.
Minerales dentro de rocas.
Cuesta de Miranda
Este tramo de la ruta nacional 40 debe su nombre a Juan Miranda, un lugareño que rentaba mulas para cruzar los Andes. Si la mítica ruta es reconocida por la belleza que la rodea, el tramo que va desde el kilómetro 3350 al 3361 no es la excepción. Este sinuoso tramo se abre paso entre las sierras de Famatina y Sañogasta, entre Villa Unión y Chilecito, y fue construida por Vicente Bolloli en 1923. Este último dato no sería significativo sino fuera por la técnica que utilizó: el pircado. Esta técnica es antisísmica, no usa pegamentos y consiste en cortar perfectamente las piedras para que calcen entre sí. En la actualidad (julio 2013) se está construyendo una ruta paralela asfaltada para facilitar el tránsito, pero la original se mantendrá para que pueda ser visitada por los turistas. Su mirador, el Bordo Atravesado, es el mejor punto para detenerse y rendirse a la belleza de la naturaleza.
Vista de la Cuesta de Miranda, en verano. Foto, gentileza Carolina Donaire -Secretaría de Turismo de La Rioja.
Vuelta del Pique
La Vuelta del Pique, con su punto más alto a 3000 msnm, es un circuito turístico en el departamento de Chilecito, que puede recorrese en bicicleta o a pie. El nombre se debe a un punto del recorrido que se llama “El Pique” donde se cultivan nogales. Durante el paseo se atraviesan varios ríos y dependerá de la época en que se lo visita para saber si es posible cruzarlos o no. Si la idea es hacer una caminata en contacto con la naturaleza, La Vuelta del Pique es un lugar ideal. Además, en la zona es posible visitar varios pueblos de montaña y conocer cómo viven sus pobladores. Entre ellos, Santa Florentina, Guanchin, Sañogasta y Miranda. Desde la Vuelta del Pique también se puede acceder al Cable Carril declarado Monumento Histórico Natural. Pueden conocer su historia en este link.
Fotos, gentileza Carolina Donaire -Secretaría de Turismo de La Rioja.
Cañón del Ocre
En el camino que une Chilecito y la mina La Mejicana (la que se relaciona con el Cable Carril), llega un punto que todo se tiñe de color ocre. Cuando digo todo es todo. Mientras estaba maravillado con los colores que veía, me acerqué a una de las paredes accesibles a pie y con sólo tocar cualquier parte ésta se desmorona “como si nada” en pequeños fragmentos entre amarillos y marrones. Si con semejante facilidad se puede quitar ocre de las paredes, cómo el río no iba a tallar semejante cañón que deslumbraría al más escéptico. Ocre por doquier, en las paredes, en el suelo y en piletones naturales dejaron mis zapatillas totalmente camufladas con el medio. Una escenografía única que sólo la naturaleza puede crear.
Cañón del Ocre.
Piletones de ocre.
Paisaje en el camino hacia el Cañón del Ocre.
En este mapa ubicamos los lugares mencionados en el texto.
Información útil
La Reserva Natural El Chiflón está abierta en verano de 8 a 18 y, en invierno, de 9 a 17. Igualmente, consultar antes de salir porque pueden varias. La duración de los circuitos son de una, dos y media y tres y media horas. El precio de la entrada es de 50 pesos argentinos por persona.
Los circuitos son:
El primero: se transita parte en vehículo y los 800 metros finales a pie por una senda muy bonita con importantes atractivos en sus márgenes. Se podrán ver, por ejemplo, restos de troncos petrificados, formaciones de areniscas cinceladas por siglos de erosión eólica y que hoy dan nombre a formaciones tales como”La Pirámide”,”LaTortuga”,”EI loro”, “La Casa” y ” La Cara del Gaucho”. Posiblemente puedan avistarse cóndores y el final de la senda hay un mirador natural que nos permite una amplia visual del valle circundante.
El segundo: luego de 3 km por un camino de ripio, se llega a un punto a partir del cual es necesario transitar a pie flanqueado por los imponentes cerros de varias formas e impactantes colores. Se verán formaciones como “El Elefante” y “EI Bolillero”. A lo largo de la senda de 1500 metros de extensión es común encontrar madera fosilizada y piedras de los colores más variados.
El tercero: se inicia dos kilómetros más adelante de la entrada del parque, camino al paraje La Torre. En este circuito observaremos la formación más impresionante de todo el parque, conocida como “Las Pretinas” y también visitaremos el famoso”Hongo ” y” el Ojo de la Cerradura”.
Más información en la web de la Secretaría de Turismo de La Rioja.
En el próximo post… el Parque Nacional Talampaya y una guía para recorrerlo.
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