Imogen necesita alejarse de la persona que ha roto su corazón y de una familia que piensa que no es capaz de cuidarse por sí sola, desea comenzar de cero. El problema es que no sabe cómo hacerlo porque se ha dado cuenta de que en verdad no se conoce a sí misma.
Por ello, su mejor amiga lo organizará todo para llevarla consigo hasta Irlanda, donde le espera su primer puesto de trabajo en una residencia clínica como enfermera y una habitación de alquiler en una preciosa cottage a los pies de los acantilados de Howth, que compartirá con un joven pescador.
Nadie en el pueblo esperaba que Liam regresara después de tanto tiempo, pero él también se sorprende cuando al llegar se encuentra con que su familia ha metido a una inquilina en su casa.
Mientras Imogen irá descubriéndose poco a poco con su “lista de nuevas experiencias”, su misterioso compañero de casa se volcará en ayudarla a conseguir todos sus retos, terminando por poner a prueba los sentimientos de su corazón.
Tres pacientes con mucho que aportar, un club de lectura con algo de magia y una amistad inquebrantable, enseñarán a Imogen que en la vida solo hay que saltar las olas.
Estrella es una ladrona muy talentosa, y entrenada para robar artefactos mágicos de la Orden, los creadores de la Brecha. Con su habilidad innata para manipular el tiempo, ella puede saltar al pasado para conseguir esos artefactos antes de que la Orden lo note. Pero todo su entrenamiento tiene un objetivo final: viajar a 1902 para robar un libro muy importante, antes de que el Mago, un joven astuto que hará hasta lo imposible por sobrevivir, lo destruya y así condene a los Mageus por el resto de sus vidas.
La vieja Nueva York es un lugar peligroso, gobernado por pandillas implacables y sociedades secretas. Un lugar en donde el mismísimo aire emana magia. Allí, nada es lo que parece, ni siquiera el Mago. Y para que Estrella pueda salvar su futuro, tendrá que traicionar a todos en el pasado.
Me llamo Eric Zimmerman y soy un poderoso empresario alemán. Me caracterizo por ser un hombre frío e impersonal, que disfruta del sexo sin amor y sin compromiso.
En uno de mis viajes a España para visitar una de mis delegaciones conocí a una joven llamada Judith Flores. Ella me hizo reír, me hizo cantar, me hizo incluso bailar, y yo no estaba acostumbrado a eso. Cuando me di cuenta de que sentía más de lo que debía, me alejé de ella, pero regresé, pues esa mujer me atraía como un imán.
A partir de ese momento comenzamos una relación plagada de fantasía y erotismo, en la que disfruté enseñando a Judith a gozar del sexo de una manera que ella nunca había imaginado. Y tú, ¿te atreves a descubrir el lado sumiso, dominante y voyeur que todos llevamos dentro?
En el amanecer de los tiempos Había 13
Casas en la Galaxia del Zodíaco.
Ahora solo quedan 12…
Rhoma Grace, una estudiante de 16 años proveniente de la Casa de Cáncer, tiene una forma inusual de leer las estrellas: indaga historias en el cielo en vez de seguir los pasos para realizar predicciones certeras. Y no puede resolver la incógnita ni para salvar su vida.
Cuando una violenta explosión desalinea la luna de Cáncer, matando a miles de ciudadanos, incluyendo a su amada Guardiana, Rho es la mayor sorprendida al ser nombrada como la nueva líder de su Casa. Pero, como una auténtica canceriana, ama su hogar con uñas y dientes y acepta proteger a su gente pase lo que pase.
Las catástrofes no se detienen en Cáncer. Cuando Casa tras Casa cae víctima de anormales accidentes meteorológicos, Rho empieza a sospechar que Ocus, el exiliado decimotercer Guardián de la leyenda, ha regresado para hacer cumplir su venganza a lo largo del Zodíaco. Ahora Rho ‒junto a Hysan Dax, un joven enviado de la Casa de Libra, y Mathias, un comandante de la guardia canceriana‒ deberá viajar a través de la galaxia para advertir al resto de los Guardianes.
¿Quién creerá lo que diga esta joven sin experiencia? ¿Y en quién podrá confiar Rho cuando el mundo se define por sus diferencias?
Un chico con el corazón de hielo.
Una chica que huye de sí misma.
Dos destinos que se cruzan.
Heather cree que solo hay tres cosas que sabe hacer: atraer problemas, salir huyendo y correr. Así es como termina en Alaska, en un pequeño pueblo perdido, trabajando de camarera mientras intenta llevar una vida nueva y tranquila. Su único problema es que uno de los dueños del restaurante parece odiarla y que ella nunca antes ha conocido a nadie que despierte tanto su curiosidad. Nilak es reservado, frío y distante, pero Heather puede ver a través de todas las capas tras las que se esconde y sabe que en ocasiones hay recuerdos que pesan demasiado; como los de sus propios errores, esos que intenta dejar atrás.
Pero, a veces, la vida te da una segunda oportunidad. La nieve empieza a derretirse. Y todo encaja.