Empezar diciendo que Alien Covenant mejora (y mucho) Prometheus es tan inútil como decir que la pizza está más buena que masticar un ibuprofeno... Ridley Scott nos entrega en ésta ocasión una precuela que sí conecta de verdad y de forma clara con aquella obra maestra de 1979 que fue Alien, el octavo pasajero. Se nota que el director ha tomado buena nota de las críticas que recibió Prometheus en su día...de hecho podría haberse llamado Prometheus 2 pero mejor desmarcarse de aquella joyita.
En ésta nueva entrega nos cuentan la historia de la Covenant, una nave colonizadora que se dirige a un lejano planeta para abrir una franquicia de la Tierra. Un bache espacial despierta a la tripulación de sus cápsulas de hibernación y por casualidad captan una señal desde un planeta que tiene una pinta perfecta para ser colonizado y, oye, está más cerca que el otro, así que deciden explorarlo para ver su viabilidad. Y éste planeta no es otro que en el que se desarrolló diez años antes (cronológicamente) la antes citada Prometheus.
Menos innovadora que la anterior y también menos filosófica, en Alien Covenant volvemos a vivir momentos ya clásicos de la saga a modo de guiño para satisfacer a los fans y para que en ésta ocasión no quede duda alguna de que estamos ante el principio de la historia que nos cuenta la saga clásica de los xenomorfos. Sí echamos en falta una Ripley en condiciones, Katherine Waterston (Animales fantásticos y donde encontrarlos) lo intenta pero su protagonista femenina es un poco descafeinada en comparación de las grandes heroínas a las que nos tienen acostumbrados, aunque también es complicado destacar enfrente de un Michael Fassbender absolutamente magistral por partida doble (David/Walter), ofreciendo una interpretación contenida pero sencillamente impresionante.
El resto del reparto cumple con solvencia pero sin grandes aspavientos, quizás destaca Danny McBride en uno de los pocos papeles serios que se le recuerdan y el mexicano Demián Bichir que destacan por encima de una tripulación insulsa que hace que te importe poco si sobreviven o no...Mención especial al cameo de un conocido actor que aparece en Alien Covenant de una manera algo especial, tampoco queremos hacer spoilers...
En definitiva, Alien Covenant es cubo de palomitas perfecto para quitarnos el mal sabor de boca que nos dejó Prometheus. Así sí, Ridley. Así sí.