Legumbres
Las legumbres y su alto contenido en fibra son esenciales para prevenir el cáncer de colon. Aumenta la ingesta de judías, garbanzos, lentejas y guisantes, tu sistema digestivo te lo agradecerá.
Tomate
El tomate es rico en licopeno, también presente en otras frutas y verduras de color rojo. Está demostrado que protege contra el cáncer de colon y de próstata. No lo olvides en tus ensaladas.
Soya
La soja es muy efectiva contra los tumores de mama y ovarios. La puedes consumir en ensalada o en productos a base de soja, como ciertos tipos de leche.
Arroz integral
El arroz integral contiene inhibidores de la proteasa, lo que retrasa la aparición de la enfermedad y protege contra ella. Además, viene muy bien para agilizar el tránsito intestinal.
Ajo
Tanto el ajo como la cebolla ayudan a depurar el hígado y por tanto favorecen la liberación de toxinas de la sangre y los tejidos, protegiendo las células.
Aceite de oliva
El aceite de oliva es excelente para mantener sanas y flexibles las venas y arterias y en consecuencia oxigenar los tejidos. Toma una cucharada al día repartida en tus comidas.
Yogur
Los lactobacilos que contiene el yogur protegen la flora intestinal y evitan la acumulación de toxinas. Tómalo con frutas o cereales y notarás que además de estar riquísimo te sientes más ligera.
Té verde
El té verde es rico en polifenoles con un alto poder antioxidante y anti radicales libres. También puedes optar por el té bancha, un tipo de té que cuyas hojas permanecen durante tres años en la planta antes de ser recolectadas y que es rico en vitaminas y calcio.