- 12 alitas de pollo.
- Mojó picón.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal y pimienta.
Lo primero que hacemos es salpimentar las alitas y ponerle una buena capa de sala de mojo picón, en este caso lo hice con una salsa de la Familia Suárez que tengo que confesar que nos gustó mucho en casa, ya que como no picaba lo pueden tomar hasta los más pequeños de la casa.
Lo dejamos macerar un mínimo de cuatro horas. Luego untamos un poco de aceite en una bandeja apta para horno y colocamos las alitas, las dejamos 25 minutos a 180º, las damos la vuelta y las dejamos otros 25 minutos y ya están listas para servir. Eso sí tened mucho pan a mano porque la salsa está para chuparse los dedos.
Gasto: 3 euros.
Raciones: 2 raciones.
Dificultad: Fácil.