He de reconocer que el jersey del gato colgando me ha hecho toda la gracia del mundo. Y que tengo las medias de gato las cuales me encanta. Y un sombrero con orejas de gato tampoco lo descartaría... Sin embargo mi amor por los gatos no es incondicional y no me pondría el vestido amarillo con los dos gatos gordos.
¿Hasta donde llega tu amor por los gatos?