Aloha from Hawaii

Por Illegalreturn
Es ya una tradición de este autor, rajar de forma inmisericorde cuando llega este esperpento, conocido en el mundo de la NFL como Pro Bowl y, fuera de él, por algo sólo comparable a un partido entre solteros contra casados. Peor aún!, por lo menos esas costelladas están repletas de espíritu, pundonor, orgullo y una violencia que haría sobrecoger al más asesino de los jugadores de línea.
Nunca he sido muy partidario de todo este tipo de partidos. Si falta el aliciente de la victoria y sobra relajación en la defensa y el ataque, es dificilmente digerible para cualquier aficionado que se precie partidos amistosos o simulacros de exhibición como el referido. Así que, a nadie extrañará leer que la Pro Bowl es una estafa. Una obra teatral, una tragedia sino fuera porque todos nos la tomamos en su justa medida, es decir, como una burda comedia. La Pro Bowl es el ejemplo perfecto de cómo parecer que se juega a football tomando el pelo a todos los espectadores. Prohibido golpear al quarterback, los receptores no intentarán ganar yardas after catch, manos arriba en los placajes, prohibido rigurosamente los blitz o el press coverage, intentional grounding permitido.... permitidme la franqueza pero esto, ¿qué mierda es?.
Así que no os extrañe si las imágenes previas al evento se limitan a mostrar sonrientes jugadores recibidos con el típico collar de flores hawaiano y otros metidos en jacuzzi. Risas, cachondeo, buen tiempo, playas paradisíacas. Eso es la Pro Bowl. Vacaciones pagadas a cuenta de la organización para jugadores, técnicos y directivos. Bien por ellos.