Reserva de gran valor Las islas pequeñas tienen un alto nivel de biodiversidad y albergan muchas especies endémicas, algunas en grave peligro de extinción. Muchas especies insulares se han extinguido. De las 724 extinciones de especies animales registradas durante los últimos 400 años, en torno a la mitad eran especies insulares y al menos el 90% de las especies de aves que se han extinguido durante este periodo habitaban en las islas. Varios pequeños Estados insulares en desarrollo, entre ellos, Maldivas, Tuvalu y algunos Estados insulares del Caribe trabajan con la intención de conseguir la “neutralidad climática” mediante el uso de energía renovable y otras estrategias. Además, al reto de las islas al que se dedica este año el Día Mundial del Medio Ambiente se añade el reto global, agravado con las últimas noticias científicas sobre el cambio climático. Y es que la concentración mensual de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera superó durante el pasado mes de abril el nivel de las 400 partes por millón (ppm) en todo el hemisferio norte, según los datos confirmados por el Organización Meteorológica Mundial. Es un indicador graveque marca, según los científicos, que estamos en el punto de no retorno y que ha coincidido con un informe de la NASA que resume las proyecciones climáticas para las grandes zonas del planeta. Según este estudio, en Europa aumentará notablemente el riesgo de inundaciones catastróficas en el interior, en las costas también habrá inundaciones más frecuentes, y la erosión se agudizará por las tormentas y la subida del nivel del mar. Igualmente, se prevé la reducción de los glaciares en las áreas montañosas así como la cubierta de nieve en las latitudes altas. La pérdida de especies animales y vegetales será importante y se reducirá la productividad de las cosechas en el sur del continente. En España, el aumento del mar será notable en el delta del Ebro o zonas bajas como la desembocadura del Guadalquivir o Huelva, y tendrá efectos negativos en puertos e infraestructuras costeras, incluso con pérdida de operatividad en muchos casos. Sin embargo, hace unas semanas también se ha conocido que España es el tercer país de la UE que más redujo sus emisiones de CO2 en 2013. La crisis económica y la producción eléctrica con tecnología eólica están entre las causas. La UE redujo sus emisiones de CO2 un 2,5% en 2013, un porcentaje positivo en comparación con el año anterior, cuando había logrado una caída interanual en el nivel de emisiones del 1, 6%. En total, 22 países de los 28 que forman la UE redujeron su nivel de CO2 en 2013. Estos datos, pese a todo, no logran generar el suficiente optimismo por su coyunturalidad y por la cada vez más importante cuota en las emisiones de los países emergentes. Con este panorama, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que tendrá lugar en París entre noviembre y diciembre de 2015 está destinada a jugar un papel clave y es vista ya por muchos expertos como una de las últimas oportunidades para abordar en clave internacional el reto climático. Saber si es la meta decisiva para frenar el cambio climático es cuestión de unos meses.
Por Oriol Lladó Publicado en fundrogertorne.org