Increíble. Sin explicación. Eso puede resumir a la perfección lo que pasó con el equipo de Diego Maradona en la final de la Copa del Golfo. El Al Wasl tenía todo servido para ser campeón en su casa tras haberle ganado 3 a 1 al Al Muharraq en Bahrein, pero con una actuación desastrosa dilapidó la ventaja y terminó perdiendo por penales. ¿Y el celular de Dios? Parece que el Diez no lo tiene.
¿Qué hizo el equipo amarillo para desaprovechar el 3-1 de la ida? Entre otras cosas perder la marca en el corner que derivó en el primer gol, hacerse expulsar (el arquero) a los diez minutos de juego, resbalarse y dejar al delantero rival convertir (en el segundo gol) y no tener puntería en los penales. Todo ese compendio de errores hicieron que el Al Wasl no pudiera repetir el título conseguido en 2010, cuando se consagró en Qatar.
Los goles del campeón los convirtieron por Jamal Braro, Ismael Abdullatif y Saleh Abdulhamid, mientras que Yasser Salim había marcado el empate transitorio. En los penales fueron dos los jugadores del Al Wasl que fallaron: el ex Argentinos Jrs. Juan Mercier (Mariano Donda convirtió el suyo)y Darweesh Mubarak. Fue Abdullatif el héroe del encuentro al marcar el 5-4 que le permitió a Al Muharraq ganar su primera Liga de Campeones GGC, luego de tres intentos fallidos: 1989, 2002 y 2003.
¿Cómo catalogar la primera temporada de Diego en los Emiratos Árabes? De regular para mala porque en la Liga empezó muy mal y terminó jugando con suplentes para abocarse de lleno a la Copa del Golfo. Y en esta competencia no pudo cerrar lo que había sido un andamiaje perfecto. ¿Qué no le trajeron los refuerzos que el pidió? Puede ser. También hay que reconocer que el astro argentino había dicho que debía ganar algo para estar más tranquilo de cara a la próxima temporada. ¿Le traeran los jugadores que él quiere? ¿Armará el super equipo que sueña Al Wasl? Eso está por verse. La actualidad es que por un tiempo el club amarillo está teñido de negro…
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