A mediados de octubre de 2018 estuve de pasada por el Parque Nacional Lihué Calel ya que me dirigía a la provincia de Neuquén y luego de pasar la noche, mientras el sol asomaba decidí aprovechar unas horas antes de seguir camino y recorrer unos senderos hasta la base de los cerros, junto ami hija Agustina. A mitad del sendero, en las ramas de uno árboles quemados en enero de ese año por el gran incendio que arrasó con más de 1.000.000 de hectáreas de la provincia de La Pampa y que afectó mucho a Lihué Valel había un grupo de jote cabeza colorada (Cathartes aura) que permanecieron relativamente confiados mientras los observábamos desde abajo.A la vuelta, luego de recorrer y caminar por las laderas de la sierra, llenas de flores y plantas anuales que brotan luego del incendio todavía permanecían algunos jotes, logrando excelente acercamiento de esta especie, el más cercano por el momento.Estas aves son bastante frecuentes en gran parte del país, aunque extrañamente no están en la ecorregión pampeana, siendo que tienen comida en abundancia por la gran cantidad de ganado que se cría, no faltándoles el alimento que es la carroña, aprovechado en esta región por caranchos y chimangos.