"The Piano / Lezioni di Piano" soundtrack
Lasparedes del camerino bien iluminado sofocan las voces de la audiencia que a lolejos se escuchan; una multitud de flores y rosas pintorescas pintan y perfumanel reducido espacio. Miro el espejo y éste me devuelve una mirada dorada, loscabellos de oro sujetos en unas discretas pinzas que relucen y brillan como unhermoso halo de luz; en conjunto se muestran los perfectos rasgos de una mujeretérea, hermosa, siempre serena, «como un ángel triste» dicen algunos. La verdad es que sí, existen muchosmotivos para mi tristeza, sin embargo éste es el momento de alegría, donde elcorazón habla y siente más, donde digo en la música lo que en palabras esimposible; es aquí donde vivo el éxtasis de la vida, donde siento las cancionesy las serenatas que nadie me dedicará otra vez, donde vivo la pasión y sonríoen medio del crescendo de la melodíay sus notas. Una mano toca mi hombro, es la señal deque ha llegado la hora. Siento que el corazón poco a poco se acelera, las manosestán algo húmedas pero, aun así seguras. Empiezo a avanzar en medio de lososcuros pasillos, las luces en el techo me saludan, el anillo con su piedra deámbar reluce y brilla mágico, te recuerdo como acostumbro hacerlo en estosmomentos y añoro tu presencia. ¡Ojala estuvieras aquí! ¡Ojala no hubiésemossubido a ese tren, ojala no te hubiese perdido!. Ingreso al escenario en esta silla de ruedasblanca y dorada, la multitud me ovaciona, siento como todos esperan expectantesmi actuación y murmuran entre ellos que«¡Ámbar es un prodigio! ¡Su música escelestial!»Ah! que ciegos, que absurdos son todos,no soy lo que tanto exclaman. Frente a ellos toca un alma dolida y solitariaque dedica su música a ese hombre que tanto amó, que extraña a cada rato y alque nunca más oirá decir «eres mi joya de ámbar, tus ojos llenan deluz mi vida y hacen latir más de prisa mi corazón. Je t´aime». Una lágrima rueda sobre mi mejilla,comienzo a tocar y mi mente se aleja de todo. Nos veo de nuevo en el viejoparque, llenos de risas, corriendo y recogiendo flores de margaritas llenas desueños, con la luz del sol de fondo; te recuerdo amándome como yo te amo ahora,mientras mis dedos vuelan, tocando esta canción para ti.
Nyra.-