Para rematar el cúmulo de detalles encontramos como último acierto las variadas texturas que se esconden en lugares precisossw de los objetos escondidos bajo las solapas de las páginas. Orejas suaves, barrigas peludas o uniformes rugosos serán el objetivo final de las yemas diminutas de los bebés lectores tras jugar a descubrir y esconder las sorpresas de este libro. A Álvaro le entusiasma palpar la barriguita del osito de la portada. Es encantador encontrarlo tan embobado con un libro, la verdad. Gracias sinceras, Aurora.
Este título pertenece a una colección del que ya conocíamos "Sorpresa: los juguetes". Si alguno no sabe qué regalarnos por Navidades encontrará otros igual de interesantes. Ejem, es sólo una sugerencia.