Es un amor tan especial; y es tan loco que cambia lo que antes pensábamos: Lo digo por que a mí me cambió mucho. Yo solo pensaba, que quería tener muchas mascotas, cuidarlas y quererlas mucho; mi papá, siempre tenía que ver con todos los perros y gatos que yo recogía de la calle; fueron muchos y el con paciencia y con amor por ellos también, les buscaba hogar, y yo en mi labor de adoptar, hasta serpientes, pero mi mamá puso el grito en el cielo en cuanto a los reptiles. Pensaba fervientemente, que esa iba a ser mi vida refugios y refugios llenos de animales; y si me llegaba a casar algún día, adoptaría un niño ya grandecito (siempre decía grandecito). Y cuando me enamoré, mi esposo venía con un regalo extra ; una hermosa princesa de 6 años; cuando yo la conocí; fue amor a primera vista entre ella y yo; Mayra, fue mi primer hija a pedido; después vinieron los hijos de mis entrañas. Mi precioso Juan, mi hermoso Emanuel; mi lindo Felipe; mi princesa Angela María, mi enviada Gabriela; Mi potente hombrecito, Miguel Andrés; mi nenita Daniela, mi pequeña florecita Manuela; Mi cerezita Deborah (Lo último que se pone de adorno en un postre); Y el regalo de restitución mas hermoso que llegó a bendecir y alegrar nuestras vidas; las de sus hermanitos y la mía. Cada día crecen los niños de mis entrañas y regalos enviados por Dios. Ahora con un padre poderoso, que los representa y los ama y ellos lo saben, han visto con sus propios ojos los milagros y los han vivido. Pero este amor; el amor de madre es más grande de lo que uno piensa y últimamente han venido a mi los hijos de mi corazón, los que no tuve en mis entrañas, pero los han puesto en mi corazón, en mi pensamiento y en mis oraciones; y yo que decía que me hacían falta muchos años para preocuparme por algún matrimonio; pero ellos todos están muy cerca de esas fechas; de que se desarrollen como unos buenos hombres; recios, valientes; algunos enojones; yo sabía que esa tierra y yo, teníamos algo que nos unía (siempre, me gustó; estoy enamorada de su comida, sus ropas, sus telas; la pasión y el respeto por sus mayores). Yo sabia que habían cosas buenas; pero nunca me imagine, que me iba a dar hijos, que no son de mis entrañas, pero si de mi corazón. Quiero solo lo mejor para ellos, han ocupado mucho de mi tiempo, como si les debiera horas, he llorado mucho también, cuando siento que no están bien, pero conozco la fe con mis niños y, sé que están en las mejores manos y que no fue para nada mi idea; que fue Dios el que los puso en mi corazón; son tan diferentes, así como son mis niños; diferentes caracteres, diferentes genios; diferentes visiones, diversos dones, diversos talentos, pero todos en mi corazón.
yo siempre les digo a mis niños, que los invito a mi barriguita que se metan allí, para tenerlos seguros; pero es ganas de guardarlos y de protegerlos. A los hijos de mi corazón yo les bendigo sus madres, sus hermosas madres tuvieron el privilegio de tenerlos y cuidarlos; creo, que algunos fueron loquitos cuando niños, pero créanme esas dudas las voy a resolver, algún día; bendito el vientre, sus padres, sus hermanos, sus familias; Te agradezco Señor, por sus cumpleaños, sus graduaciones, sus triunfos; tal vez, han tenido caídas, lagrimas de derrotas y dolores profundos; pero ellos son un motivo más para agradecer y ahora un motivo de oración; sus novias y las que se van a convertir en sus esposas (motivo de superoración; porque quiero que sean hombres y mujeres felices en sus matrimonios); si en algo ellos me conocen, saben que he procurado, que sean unos caballeros y que sean unos hombres diferentes, con un corazón sano. Quiero sean muy felices, que sean hombres que impacten, que amen a Dios sobre todo; que vivan una vida diferente buena, sobreabundada; que cambien y transformen vidas; que ayuden, porque todos son dadivosos y ellos deben entender, que no son cualquier persona, son hijos escogidos para grandes cosas y propósitos; quiero que sean grandes empresarios, pero que sepan que hacer con su dinero, que sean caritativos, misericordiosos; que sean entendidos, que sean fuertes; que estén sanos; que sean obedientes a nuestro Dios y que alcancen todos los propósitos que Dios tiene para ellos; serán los mejores esposos, porque a mis hijos y a ellos, el señor les entregará sabiduría; y que el señor ponga a las princesas que Dios tiene destinadas para mis hijos y que traiga a los hombres, que Dios tiene destinados para mis hijas; en el tiempo y el lugar indicado y que quite todo estorbo, personas, cosas, sentimientos, circunstancias que no sean las que ellos deban vivir. Yo declaro que ellos son los hombres y las mujeres más bendecidas, que son guardados y protegidos permanentemente, que son libres, que son sanos; que ninguna maldición los alcanzará, porque tienen un Dios que ha pagado un alto precio; el precio que solo el pudo pagar; que van a ser los más prósperos, los más bendecidos; que la gracia y el favor los van a acompañar; que los milagros sucederán donde ellos estén, que siempre le van a dar la gloria a Dios; que van a procurar siempre sus bendiciones; que miles y miles son sus ejércitos para protegerlos; que Dios siempre va a usar a poderosos para bendecirlos; y mantendrá sus puertas abiertas, las que El tenga destinadas; pero que no van a poder acceder a cosas que les hagan daño, así las anhelen mucho; que ninguna arma forjada contra ellos prosperen; ellos lo saben; por mí los guardaría, dentro de mi corazón y no los sacaría, para que nunca les hicieran daño, o en guardarlos en un convento construido solo para ellos y celebrarles los dulces 25; con boda de una vez? (estarán de acuerdo?), pero esa o es la vida, la vida es formarlos, enseñarlos, dejarlos, así a mi se me mueran todas las lombrices y me pasen todos los corrientazos (esos momentos en que ellos se caen y uno se siente, no se, horrible y un alivio grande, cuando no fue sino un susto); lo más duro para mi, cuando eres madre de tantos hijos; es no saber todo de todos; cuando tuve a Juan José mi primer hijo, sabía exactamente, cuando le salía una pepita o una rayita, sabía como pasó, porque siempre estaba cuidándolo; ahora se me escapan muchas cosas y ahora sola; se escapan más cosas; y hay muchas cosas que desconozco de los hijos de mis entrañas (mis regalos de bendición) y aún es más duro no saber todo, de lo de mis hijos de mi corazón ( el idioma ha sido un problema; a unos les encanta hablar mucho y preguntar mucho; pero otros, son poco informativos, como buenos hombres (pero prometo, esposas de mis hijos, que ellos van a ser más comunicativos). Los amo a todos con todo mi corazón; no se si alguna vez, les conté, que no podía tener hijos?; por esos los hijos e hijas de mis entrañas y de mi corazón; son definitivamente, un regalo de parte de Dios. Hoy estaba hablando con Felipe, que sería un sueño construir un conjunto; para todos ustedes; pero como vamos; será mejor un edificio (una locura; que para Dios es posible). Los amo; niños de mi corazón; ustedes son los primeros regalos de mi restitución; he sembrado y ahora estoy recogiendo y seguiré contándoles más cosas en otra oportunidad.
Para todos ustedes (en orden de aparición) Mayra,(Juanes); Juan José, Emanuel, Felipe, Angela, Gabriela, Miguelito, Daniela, Manuelita; Deborah; Matthias; Harpreet, Jatinder, Muzahid, Emraan, A. A. Hijos de mi corazón. No olvido; que ustedes deben vivir y reescribir una nueva vida; pero tienen, otra persona más, interesada por ustedes, sus vidas y sus causas y si yo que no soy nadie tengo estos sentimientos y quiero todo esto para ustedes; imagínense todo lo que Dios les ama y tiene para ustedes; pero no se lo imaginen, vívanlo, están en las mejores manos, yo confió en mi señor que así es.Los amo con todo mi corazón y los bendigo, los bendigo y mil y toda las veces los bendigo; bendigo sus vidas, sus corazones; sus cuerpos, sus células; sus trabajos, sus familias; sus casas y todo lo que tenga que ver con ustedes.Adriana (Mamá)