"En una noche quiero encontrar el amor... ¿Amor? Si, amor y dinero, el pack completo"
La fama es afrodisíaca. Los lugares donde acuden los personajes conocidos por sus trabajos, sus cuerpos o ambas cosas, resultan mas tentadores que nunca para las personas del día a día, aquellos que tienen una jornada de trabajo y compra la ropa en las tiendas de inditex, huelen de la misma manera aunque deseen lo contrario y se acurrucan en las paradas de autobuses para regresas a sus respectivas casas a altas horas de la madrugada. Es tentador porque es un escaparate con miles de brillos donde el 90-60-90 se encuentra mas presente que nunca, donde las mujeres saben perfectamente que gracias a un full de ases en su escote y un ágil movimiento conseguirán meterse en la bragueta de alguien, aunque en unas pocas horas solo se convierta en sexo rápido y guarro. Un mundo de destellos, un espectáculo efímero en la noche dentro de la noche. Una boca exactamente igual a las demás con la única diferencia de que… Puedes tener la suerte de ver a alguien conocido gracias a los medios de comunicación.
Esta tarde en el trabajo JessicaRabbit me ha comentado lo que me había dicho hace unos días Campanilla, que deseaban ir a uno de esos lugares parecidos al de esa noche, con la única diferencia de que allí se encontrarían a hombres mayoritariamente heteros y no gays como fue aquel día, o en su defecto bisexuales. En teoría saldremos dentro de unas semanas a uno de los pufs “más in” de la ciudad en compañía de otras dos chicas del trabajo y de Remy, el cual ya tiene escogida la ropa. Con la entrada gratuita, gracias a que un amigo de una de mis compañeras es relaciones o algo parecido… Sino pasaremos al plan B, el plan B es que hable con ciertos amigos que me den entradas a otros lugares igual de “in”. Lo cual me llevó preguntarle a Jessica el por qué de tanto interés, al fin y al cabo como le conté es un lugar donde debes de ir de punta en blanco, no en el sentido “de etiqueta”, pero si lo más “mujer fatal” posible como aquel que dice. Al menos que el zapato de tacón no falte, pantalones ceñidos o mini faldas… Que no es lo mismo que ir de “chica de la esquina”, que eso es otra cosa muy distinta y otra clase muy diferente. Y si a eso le juntas a que si normalmente eres carne de cañón de escaparate donde todos repasan de arriba abajo a todos en general, y desechan en un segundo a quién si y a quién no… A mi me pone de los nervios.
Sé porque quieren ir, porque allí hay hombres guapos, atractivos y con bastante dinero que les sobra. Hombres de éxito y de negocio, hombres deseados… Y a excepción de una compañera que tiene novio y que yo que estoy en plan “ni fú ni fá”, las demás van a lo que van… Ellas dicen que buscan amor, pero lo peor es que lo dicen en serio, tipo “amor de pelas”. A lo mejor es porque yo estuve con alguien que si que tenía dinero y he podido ver lo que sería parte de mi futuro si lo nuestro hubiera salido, yo abría la boca y Mr. Perfecto me daba lo que quisiera… Aún recuerdo cuando me quedé mirando embobada el libro de Chema Madoz y al darme la vuelta me lo había comprado. Tal vez es por eso o porque a mí no me gusta que me pongan todo tan fácil… El caso es que yo no podría estar con alguien solo por dinero, porque te acaba cansando, acabas por tener cosas materiales que intentan reemplazar lo que realmente merece la pena, es decir: “la propia chispa”.