DATOS PRACTICOS:
LA CIUDAD EN SI: Ámsterdam representa lo que alguna vez en la mente de todo español nos imaginamos como era una ciudad europea, es una ciudad abierta, respetuosa con el medio ambiente, multicultural, mentalmente evolucionada etc... es maravilloso perderse por sus calles flanqueadas por canales, sorprenderte por el barrio rojo, disfrutar de sus magníficos museos y por que no hacer una visita a alguno de los cientos de cofees shop.
COMIDA Y PRECIOS:La comida Holandesa no es comparable en riqueza a la española o la francesa, pero también tiene sus cositas, muy recomendable probar los maravillosos arenques en cualquier puentecillo callejero aunque se pueden encontrar restaurantes de todo tipo de cocina del mundo, argentinos, indus, italianos y por supuesto holandeses (estos últimos un poco caros).
Los precios desde la entrada del euro son muy parecidos a los de España, quizas un pelin más elevados, sobre todo en el alcohol.
SANIDAD Y SEGURIDAD:
Ámsterdam no es aparentemente un lugar inseguro, en el fondo es una ciudad pequeña aunque lógicamente debido al gran número de turistas siempre hay que utilizar un poco el sentido común, pero nada fuera de lo normal.
En cuanto a la sanidad, es necesario sacarse en España la tarjeta sanitaria europea, te la sacas en el mismo momento y te cubre prácticamente igual que en España por lo que no se hace necesario un seguro medico.
SOCIEDAD Y GENTE:
Los holandeses son en general gente educada y bastante cívicos, tampoco es que sean la alegría del huerto pero vamos agradables en general, ojito con pasear por el carril bici, no es de extrañar que después de un pitido fuerte algún lugareño en bici se caga en tres generaciones de tu familia, aunque si no sabes holandés y apenas ingles no tienes problemas por que no le entenderás.
DIA 1.
Llegamos procedentes de Madrid a Shipol, nos quedamos un poco perplejos al ver "peazo aeropuerto" la verdad es que este es uno de los aeropuertos internacionales más importantes de Europa así que tiene sentido, en fin compramos allí mismo unos billetes para el tren de cercanías, lo coges allí mismo sin salir del aeropuerto, después de un trayecto de 20m llegamos a nuestra parada, la primera sorpresa nos la encontramos al salir a la calle, estamos en un polígono industrial y hay gallos sueltos por la calle, si si de los de la cresta, empezamos a pensar que el hotel esta más alejado del centro de lo que pensamos. Finalmente encontramos el hotel, la verdad es que esta bastante bien, allí nos informan de donde esta el centro, como ir etc, lo cierto es que no estamos tan alejados como pensábamos.
Después de dejar las maletas y asearnos un poco nos ponemos en marcha para conocer la ciudad, la primera odisea fue adquirir los ticket para el metro, en muchas estaciones no hay personas físicas, únicamente unas maquinas expendedoras, no se como lo hicimos pero sacamos ticket para personas mayores de 65 años, así que nos salieron muy baratos pero fuimos todo el trayecto preocupados no fuese que apareciera un revisor... je je finalmente y después de un corto trayecto tenemos nuestro primer contacto con las calles de Ámsterdam, andábamos maravillados cuando una tromba de agua nos sorprendió y nos obligo a meternos en un bar a tomar un café, gracias a dios fue algo rápido que no fue a ningún lugar. CUANDO IR:
El clima es parecido al de España, aunque en invierno llueve bastante y hace más frió por lo que es muy buena fecha en verano, primavera y otoño, aunque el clima no debería evitar un viaje en ninguna época del año
AEROPUERTO COMPAÑIAS AEREAS-TRANSPORTE:
Aeropuerto de Shipol se encuentra a 18 Km. de la ciudad, existen autobuses pero la mejor forma de conexión en el tren de cercanías que conecta directamente con la Central Station, cada cuarto de hora y tarda 20 minutillos, el precio aproximado son unos 3€.
ALOJAMIENTO:
La ciudad cuenta con una extensa red de alberques, B&B y hoteles, el problema es que al ser una ciudad tan visitada suele provocar que haya bastante ocupación. Nosotros nos alojamos en un tres estrellas un pelin retirado del centro, el precio era más barato y realmente al ser una ciudad pequeñita te plantabas en el centro en un plis plas.
TRANSPORTE:
Ámsterdam consta de una amplia red de transporte publico, pero el tranvía es uno de los más eficaces, también funcionan bien los autobuses y el metro que cuenta con cuatro líneas. Se pueden comprar el Strippenkaar, los tienes de 15 (6€) o 45 (18€), mucho ojo en cada desplazamiento se deben marcar tantas franjas como zonas se atraviesen más una extra denominada tarifa base, la verdad es un sistema un poco enrevesado, que nadie se extrañe si se lía un poco al adquirir los billetes.
Dirigimos nuestros pasos a la oficina de turismo que esta en la Estación Central, allí nos sucedieron dos cosas; la primera tubimos que tranquilizar a una chica andaluza que tenia una taquicardia que no veas (podeis imaginar porque) y la segunda nos hicimos después de esperar mucho tiempo con la tipica Ámsterdam Pass, que incluye la visita a los principales museos, tambien nos hicimos con unos planos y algo de información.
El resto de la tarde lo dedicamos a pasear por la zona adyacente a la Estación Central, no conseguimos acostumbrarnos al trasiego de bicicletas, sin darnos cuenta nos ponemos a pasear por los carriles bici y se han cagado en nuestra familia ya más de una vez.
Esa noche cenamos en un argentino próximo a la estación, el día no dio para mucho más, cansados del viaje y tanto patear nos volvemos al Hotel.
DIA 2.
Amanecemos muy temprano y desayunamos muy fuerte desayunamos pa ahora y pa luego (solo unos pocos entenderán esto je je). El propósito del día es ver los dos principales museos de la ciudad y de todo Holanda (en orden de importancia se refiere) el RIJKSMUESEUM, tranvías 2 y 5 y línea circular, cuesta cerca de unos 10€ y el otro el Museo Van Gogh, están pegados uno al otro, no tiene perdida.
Las colas para el RIJKS son tremendas así que es aconsejable madrugar un poquillo, es un museo grande pero no del tipo Prado así que en un mañana más o menos se puede ver, es el museo más visitado de holanda, contiene piezas de Rembrandt, Jan Vermeer, Hals entre otros। Después de ver este primer museo probamos la comida típica holandesa, unos arenques en un puesto callejero de la calle, son muy muy buenos aunque algo un pelin carillos, tienes además más variedad de diferentes pescados muy buenos también.
Tras comer no metimos de lleno en el museo Van Gogh, que como su propio nombre indica, alberga la colección del artista más completa del mundo, cuesta unos 7€, se ve relativamente rápido y es muy interesante de ver.
El resto de la tarde lo dedicamos a pasear por diferentes barrios y para acercarnos a una casa de alquiler de vehículos donde reservamos uno para el día siguiente ya que queremos ir a Brujas.
DIA 3. BRUJAS.
Hoy es un día muy especial, tenemos por delante 200 y pico Km. de Ámsterdam a Brujas y luego vuelta. Cogemos el coche y con relativa facilidad salimos de la ciudad rumbo a Bélgica, estamos muy emocionados ya que en principio era una expectativa que se esta transformando en realidad, en fin después de un trayecto de unas tres horas nos plantamos al pie de la muralla de la ciudad, un consejo, no os metáis con coche dentro de la ciudad amurallada ya que no hay apenas aparcamiento, mejor fuera y andar un poquillo.
El mejor modo de conocer Brujas es pateando, es una ciudad muy pequeñita llena de riquezas del medievo y con serpenteantes canales por todos los sitios, aunque solo pudimos estar un día, lo más recomendable es ir un fin de semana, eso no es poco ni mucho y te permite salir por la noche a disfrutar de la maravillosa cerveza belga en algún Púb. de ambiente agradable.
Los lugares más destacados son el Ayuntamiento, la plaza en si es alucinante, la Basílica románica de la Santa Sangre, La plaza del mercado, el Campanario, el Mark y el Burg que forman el centro neurálgico de Brujas.
De regreso al hotel (Ámsterdam) todavía nos quedaba alguna aventurilla, resulta que nos encontramos con la carretera cortada por obras y nos perdimos, casi acabamos en Rótterdam y no se como terminamos por carreterillas y metidos en un rió que cruzamos en un barco algo perplejos un, todo esto a las 12 de la noche, después de todo este periplo descubrimos que los Belgas también se meten de todo, en una gasolinera que paramos había un chaval semidesnudo (pagando en caja) que no podía estarse quieto y que no paraba el mismo de darse unos golpes en el pecho que no veas... nosotros en la cola tratábamos de aguantar la risa como podíamos.
Finalmente llegamos salvos y sanos a nuestro hotel para descansar.
DIA 4.
Hoy es nuestro último día en Ámsterdam, hemos decidido separarnos y mientras las féminas se toman la mañana para seguir conociendo la ciudad, nosotros (que somos madridistas) no podemos evitar ir al templo que nos dio la séptima, el estado del Ajas se encuentra ligeramente retirado de la ciudad, estación de metro Strandvliet/ArenA, hay visitas guiadas y un museo, cuesta unos 10 €, el estadio está muy bien pero vamos nada que uno de España no tenga.
Después del recorrido, regresamos al centro para unirnos al resto de la comandita
Este día nos cunde bastante la verdad, visitamos el museo-casa de Ana Frank, después hacemos un crucerito de estos pa turistas por los canales de esta preciosa ciudad, se pueden contratar en varios puntos, nosotros lo hacemos desde el muelle junto a la Estación Central, el crucero es muy agradable, además puedes ver una panorámica de la ciudad muy interesante, las casas barco, museo Nemo, incluso vimos el barco que participo gano la copa América.
Todavía y aunque parezca increíble no hemos visto el barrio rojo, auque hemos estado al lado ya en varias ocasiones, es prácticamente lo único significativo que nos queda, nos adentramos en sus callejuelas llenas de leyenda urbana, aparte de lo obvio, también hay edificios realmente bellos, buenos restaurantes y antros interesantes de venta de libros y artículos de segunda mano. Este barrio como es sabido es un hervidero de prostitución y delincuencia, hombre es demasiado turístico para ser peligroso pero si que es mejor estar más alerta que en cualquier otra zona de la ciudad, consejo, no se permite fotografiar a las prostitutas puedes meterte en un lió con alguno de los "chulos" que identificara s enfrente de los escaparates.
No podemos irnos sin hacer una visita a un famoso COFFEE SHOPS, nosotros elegimos uno muy conocido que se llama The Doors. Spuistraat 46 que es el museo no oficial de Jim Morrison, lo elegimos por afinidad con el grupo, una vez alli, la verdad es que la musica estaba tan tan alta que no podiamos ni hablar, nos fumamos un cacharrin por probarlo y en fin a unos lees sento mejor que otros, a algunos les dio taquicardia y no podian parar de andar y comer fruta en cada puesto que encontraba, pero vamos una experiencia más, tampoco se entiende la gente que va ha Ámsterdam para encerrarse en los Coffes, con la de cosas que ofrece esta ciudad.Regresamo al hotel donde nos esperaba la última sorpresa, resulta que a las 6 de la mañana teniamos reservado un vuelo con air Berlin hacia el propio Berlin, resulta que nos dio por llamar para confirmar el vuelo cuando nos dicen que en el momento de la reserva la compañía rechazo el número de tarjeta, vamos resumiento que eran las 11 de la noche y no teniamos vuelo, de inmediato nos sentamos entorno a un ordenador en el propio hotel y encontramos un vuelos a buen precio en una compañía que no habiamos oido hablar en la vida y que salia más o menos a la misma hora, lo gracioso es que no podiamo imprimir y tuvimos que apuntar el número en un trozo asqueroso de papel, a la mañana siguiente en el estan de la compañía dabamos el trocito de papel temerosos de que aquello no hubiese funcionado, todavía no estaba tan extendido lo de los vuelos por Internet, finalmente no hubo ningún problema y tomamos rumbo a Berlín donde nos esperaban un sin fin de aventuras pero eso es ya otra historia....