Ubisoft Montreal vuelve a traernos un nuevo título de uno de sus buques insignias, Assasin´s Creed Unity. Mínimo un título por año nos está ofreciendo Ubisoft de la saga, la cual debería tener un respiro y más con este título lanzado, ya que ha dejado un enfrentamiento de opiniones entre detractores de la saga y los números fansboy que todos llevan algo de razón. Nosotros intentaremos en este análisis daros los dos puntos de vista de, tanto lo bueno, que sí que tiene y mucho, y lo malo, que desgraciadamente, también tiene de que hablar. Os presentamos el análisis de Assassin´s Creed Unity, el primer título de la saga en llegar de manera exclusiva para la nueva generación de consolas.
Esta entrega nos llama la atención por ocurrir en nuestro continente, Europa, en concreto, en Francia, a finales del Siglo XVIII en pleno auge de la Revolución Francesa, momento histórico que marcó un antes y un después en la vida del hombre. Y así lo representa Unity, aunque con sus pros y sus contras. La historia, que todos esperábamos que la protagonista fuera dicha revolución, coge como protagonistas a Arno Victor Dorian, asesino que manejaremos en esta entrega, y la orden de los templarios, liderado por Elise, nuestra amiga de la infancia y compañera de viaje en ciertos momentos, dejando así en un segundo plano al movimiento político que se vive en las calles de Francia mientras nos desplazamos de un lugar a otro. ¿Entonces, estamos ante un título que lo mismo que nos sitúa en Francia nos podría haber situado en otro lugar? La respuesta es tajante; no. Y es que se aprende mucho de lo que supuso dicho movimiento político, pero para ello, debemos estar pendiente de todos los coleccionables y todas las bases de datos de los lugares cuando nos acerquemos a los nuevos lugares, en donde si nos centramos en la historia en sí, poco aprenderemos de la Revolución Francesa, en donde Napoleón, al fin y al cabo, es un personaje secundario en este juego (en la Historia todos sabemos que no fue así).
Aunque Assassin´s Creed Unity respeta el tipo de juego de sus predecesores, destacamos que esta nueva entrega se centra muchísimo en el sigilo, dejando la acción en un segundo plano aunque con mucha notoriedad también.
Hora de hablar de la mecánica y el control de nuestro personaje, resumiéndolo diciendo que ambas han sido mejoradas, aunque no pulidas. El parkour es el que tiene el mejor control de la saga, con diferencia, aunque queda aún una mayor reacción de nuestro personaje a la hora de querer hacer una determinada función, ya que en alguna ocasión, nos agarraremos o saltaremos a algunos lugares que no queríamos, incluso cuando mandamos una orden, a veces, no nos la efectúa y en otros momentos, misma orden y mismo lugar, sí. Algo que tampoco ha gustado a los más críticos. A la hora de bajar de los lugares, hacemos chapeau (y nunca mejor dicho), ya que resulta posiblemente la única acción que no podemos recriminarle nada. Ahora, el descender de algún lugar, estemos colgados o no, resulta una bendición, sin tener que hacer diferentes maniobras para poder conseguirlo, algo que los títulos predecesores no había conseguido. Una de las novedades, el nuevo sistema de coberturas, sin pulir y sin ser una referencia, pero innovador y obligatorio, el cual incita a realizar una gran número de misiones de maneras sigilosas y sin necesidad de buscar el caos. Otra acción que va de la mano con el sigilo es el abrir diferentes cerraduras, puertas y baúles, con una ganzúa, donde algunas de las cerraduras requerirán un nivel especial para poder abrirlas ya que de lo contrario resultaría inaccesible.
Los combates, aunque simples, ya que contamos con tres acciones, nos ha gustado. Esta vez no hay contraataque, pero sí seguimos teniendo acción para atacar, para frenar y, por último, esquivar. El sistema de combate es verdaderamente sencillo, presionando los botones en el momento oportuno tenemos la victoria asegurada, y si los enemigos son más fuertes que nosotros, basta con esperarlos y localizar sus numerosos puntos débiles.
Por último, la personalización de nuestro personaje Arno, que pueden ser visuales y que repercuten directamente a la mejora del rendimiento del mismo. Depende de lo que compremos, mejoramos salud, sigilo, resistencia o agilidad, y desde ya decimos que no mejoremos por mejorar, usemos la cabeza y mejoremos lo que mejor sepamos hacer o lo que más compense a nuestro personaje. Por cada misión, asesinato, subida a nuestras amadas atalayas y demás acciones, adquirimos experiencia que luego podemos usarlo en forma de puntos de habilidad.
Por otro lado, la inteligencia artificial quizás no sea la deseada. Los ciudadanos sufren numerosos bugs, descoordinación y movimientos sin sentidos, eso sí, los enemigos en cambio, mejoran con respecto a los ciudadanos. Donde destacamos un punto a favor de esta nueva entrega, si un enemigo nos ve, tendrá que dar, si le dejamos, la alarma, si somos rápidos y lo eliminamos a tiempo, nadie más se enterará. Un acierto muy positivo para esta nueva entrega.
En cuanto a duración, como con casi todos los títulos de Ubisoft, es variada. El modo historia, a pelo y tratando únicamente las misiones principales, no debe superar las veinte horas. Si a esto le sumamos las numerosas misiones secundarias, que algunas llaman la atención, la recogida de documentos, y todos y cada uno de los putos marcados en el mapa, hace que alcance, fácilmente, las sesenta horas de juego.
La dificultad, que varía entre unas misiones y otras, de manera alternada, no está muy presente en esta entrega, y más si mejoramos debidamente las habilidades de nuestro personaje. Por lo general, no es alta, aunque tampoco es un juego que nos lo pasemos sin mayor complicación. Tiene su miga.
Las misiones cooperativas presentes por primera vez en la saga dejan un muy buen sabor de boca a todos los usuarios por lo general. Hasta cuatro jugadores por pantalla, disfrutable preferiblemente, aunque no de manera única, con amigos o conocidas, aunque se trata solamente de un plus, ya que dichas misiones pueden pasarse de manera individual para quienes no les guste el cooperativo o no tengan la obligación de tener que hacerlo.
Vamos poniendo punto y final a este análisis no sin antes hablaros del apartado técnico. Un apartado que, para qué hacer la excepción, también ha mantenido sus diferencias entre los usuarios.
Hablando primero del apartado visual, y empezando, porque así lo preferimos, por los inconvenientes, no ha gustado mucho eso de ofrecernos el producto a 900p y 30 fps, de lo que tenemos que decir que de esos 900p se ha hecho para compensar a los jugadores de Microsoft y no haya esa guerra visual que tanto estamos teniendo entre ambas plataformas. Imaginaros cómo habrá sentado a los usuarios de Sony. Por otro lado, y por más que Ubisoft diga que no es la causa, los numerosos habitantes de la ciudad, una de las ciudades más vivas que se ha visto en un videojuego, o la que más, causa bajadas de frames. No produce un “dolor de vista”, pero pensamos que es evitable para quien lo hace. Para compensar la balanza, Assassin´s Creed Unity ofrece una recreación envidiable de París, de sus monumentos, y de las zonas más notorias de Francia. Quizás Unity es el comienzo en cuanto a nivel gráfico de la nueva generación de consolas. Aunque esperamos más del potencial de ambas consolas.
Y por último, antes de llegar a la conclusión final, el apartado sonoro. Como la mayoría de los títulos de Ubisoft, el juego llega doblado y con algunas jergas francesas comunes y que la mayoría de jugadores conocerán, y quienes no, leyendo lo aprenderán. Además de esto, un más que polémico doblaje de la voz de Napoleón, a la que le ha sido asignada al actual presentador de Pasapalabra, Christian Gálvez. No vamos a convencer a nadie de si esta voz encaja o no con la del general republicano, solo que vamos a destacar su esfuerzo y empeño por sacar lo mejor de sí mismo. ¿O es que alguien ha escuchado alguna vez la voz de Napoleón Bonaparte como para que se diga quién es el idóneo? Por último, el himno de la República Francesa, La Marsellesa, estará presente en todo momento, y si no suena de fondo, ya se encargará nuestro personaje de recordárnosla, aunque para descubrirlo, os invitamos a que juguéis.
Concluimos el análisis con el veredicto final. Assassin´s Creed Unity no es lo presentado en el pasado E3, y de ahí las críticas. Y merecidas, por cierto, ya que poco le faltó, si es que no lo consiguió, en ser uno de los títulos favoritos de quienes vieron la conferencia. Un título que llega con bugs, y no son pocos, aunque tampoco se ven de principio a fin. Un producto que por ambición, recursos (que sí que tiene Ubisoft) y prisas no ha sido lo esperado. ¿Necesita Ubisoft dar un respiro a esta saga? Por nuestra parte sí, por mucho que os guste una entrega anual mínimo de la saga, pero queremos que el próximo Assassin´s Creed logre las expectativas marcadas, dándonos un título único y de gran nivel, más que el que ya de por sí tiene, que no es poco. Un título que, concluyendo ya, gustará muchísimo a los fans, y a los que no, también, o al menos debería, ya que insistimos, sin ser lo que nos vendieron, estamos antes posiblemente, el mejor juego de la saga. Y no nos contradecimos con lo dicho al principio de la conclusión con esta última afirmación. Créannos y por supuesto, juéguenlo. Eso sí, nos hubiera gustado más aprender de la Revolución Francesa de manera interactiva en lugar de una manera más conceptual.
LO MEJOR
-Apartado visual.
-Mejoras del control
-Una Francia muy viva
LO PEOR
-Bugs
-No es lo esperado, pese a ser notable
“Nuestra forma de valorar los juegos“