Un clásico y sigiloso retorno
Ubisoft de manos de su estudio alojado en Bordeaux. Regresa a la palestra con una nueva entrega de Assassin's Creed la cual nos traslada al oriente más clásico bajo el nombre de Mirage.
Un juego con cantidad de matices clásicos. Con esa belleza y ambientación que tan bien saben representar. Y con una estructura jugable que los más antiguos seguidores de la saga van a ver con buenos ojos. Así que enfundados vuestra daga y capucha que comienzo con este análisis.
Conceptos bases de la experiencia
¿Pero que nos aporta este nuevo Assassin's Creed Mirage?. Pues nada más y nada menos que un regreso a sus conceptos más básicos. Todo ello empezando por la inclusión mucho más esquemática de la realización de actividades y misiones. Unas mecánicas que se acercan a esos conceptos primigenios de tener en todas ellas un objetivo base que nos lleva a un asesinato, que bajo una correcta carga narrativa que nos va guiando por diferentes situaciones, lugares, y apartados jugables. Toda una serie de misiones que poseen muy parecida concepción, y que se vuelven mucho más rígidas y poco creativas de lo que las últimas entregas aportaban. Pero también dando ese toque clásico a estas que las hacen potencialmente mucho más coherentes con el universo que nos enamoró en su día de esta franquicia.
Pese a ciertos factores que no llenen lo suficiente a todo el mundo. Este se sabe acompañar de cierta libertad, de buenas mecánicas, y unas correctas misiones secundarias, aunque estas a menudo se sienten más como tareas adicionales que como experiencias significativas que aporten ese plus refrescante y menos repetitivo.
Inmersión Narrativa. Personajes, Mundos y Diálogos
Cómo ya os iba diciendo, la nueva y enigmática historia de Assassin's Creed Mirage nos traslada a las calles de Bagdad. Bajo una entretenida trama con tintes bastante conocidos... la Orden. Y es que está precursores de los Templarios vuelve a poner todo patas arriba contra la hermandad de los Asesinos.
Una historia se enfoca en Basim. Un personaje bastante peculiar en cuanto a su carácter. Donde se puede ver una protagonista que cae bien por sus idas y venidas de actitudes y formas de actuar. Y que me ha llevado a plantearme incluso la cordura de este,e interesarme mucho más por sus pensamientos y su pasado, que casi por la trama en general. Y es que creo que este lleva todo el peso de una narrativa simple, ágil, y de fácil absorción. La cual no me ha hecho saber mucho más de este apasionante universo que ya poco sorprende, pero que siempre se agradece volver a él, y disfrutar de esa lucha constante a lo largo de la historia entre esos dos bandos, y ese buen cúmulo de personajes históricos que siempre se han sabido incrustar con sabiduría dentro de la saga.
Puntos más interesantes que nos aporta jugablemente
Entrando ya en detalles más concreto. El primero que no puedo dejar de destacar l a importancia que se le ha dado de nuevo en este Assassin's Creed Mirage al sigilo que tanto echábamos de menos. Y aunque no es de lo mejor que haya visto, la gran cantidad de opciones armamentística silenciosas y ciertos matices estratégicos consiguen de este hacer disfrutar a los amantes de esta forma de jugar. Y aunque los enemigos no son especialmente listos, ya os digo que se deja disfrutar mucho.
Por cierto, tengo que destacar dos opciones sigilosas que le dan un plus extra de posibilidades. Por un lado el retorno de la Vista de Águila, con esa visión de detective que nos permite planificar situaciones, reconociendo la zona, los enemigos y todo aquello que nos pueda servir para no ser detectado. Y por otro lado un sistema de concentración que permite permite la eliminación rápida de enemigos marcados. Y que llega como extra cuando lo estamos haciendo muy bien.
Tampoco podía faltar el retorno del parkour. Planteando movimientos fluidos y ágiles por las calles de la antigua urbes arabes. Con un sistema que se queda a medio camino entre la movilidad de las últimas entregas, un notorio diseño de escenarios, y el retorno de las limitaciones de escalada de los primeros juegos. Cosa que nos lleva a buscar rutas ingeniosas en cada edificio. Siendo especialmente destacable ese concepto casi puzle de las atalayas, y esa formas de descifrar un camino hasta su cima. En definitiva un sistema de movimiento por tejados, callejones y almenaras, que se goza muchísimo por lo bien pensado que está.
Cómo no podía ser menos, pero no teniendo tanta relevancia como en otras entregas, llega la hora del combate. Donde se vuelve a notar los conceptos clásicos de la franquicia en el que se combina ataques y contraataques, con las esquivas más modernas. Y donde todo se vuelve muy mecánico y demasiado centrado en esperar a ver cómo reacciona nuestro enemigo. Y pese a ser muy visual y llamativo creo que se queda corto en los estándares actuales, haciendo con ello que el camino del sigilo sea el más común y divertido.
Por último, no hay que dejar de hablar de puntos como un sistema de mejora correcto dentro de un variado árbol de habilidades que potencia nuestras cualidades. Y un amplio catálogo estético que permite caracterizar a nuestro personaje. Y todo ello en una aventura que me ha durado en torno a unas veinticinco horas, que me han parecido más que justas, habiendo sido bastante completista.
Conclusión
En definitiva, y terminando con este análisis de Assassin's Creed Mirage. Os tengo que concluir diciendo que la experiencia con este retorno del mundo de hermandades, asesinos y templarios me ha parecido sólido y bien acabado. Una vuelta en muchos puntos a los orígenes de la saga, que lo lleva más a esas cualidades sigilosas y más aventureras, que a eso juego de acción rolera que nos trajeron con las últimas entregas.
Un juego que no sorprende, pero que se hace divertido de jugar, agradable de controlar, y ante todo, espectacular en cuanto a esas cualidades de representación de un momento histórico y zona geográfica, con eso matices tan misteriosos que siempre a procesado la franquicia, y que como ya os digo, en este caso se retrae en sus más básico y originarios conceptos.