Análisis de Bomb Rush Cyberfunk

Publicado el 13 diciembre 2023 por Raúl Vázquez Santos @Generacionpixel

Patinando con ritmo, pero sin cabeza

En el extenso mundo de los juegos inspirados en grandes sagas o juegos es inmenso. Pero también es enorme el listado de estos que han quedado marcadas en nuestros corazones, pero también, por desgracia, en el olvido. Y sin dudarlo una de estos es Jet Set Radio.

Pero gracias a nuestra buena escena indie todo es posible. Y de ahí sale este texto. Ya que el estudio Team Reptiles, nos presenta este Bomb Rush Cyberfunk cómo claro homenaje, y sensación de predecesor, y claro homenaje. Con un equipo donde ha podido incluso incluir algún que otro componente del equipo de aquel mítico juego.

Así que dejaros llevar por el funky, los grafitis, y el patinaje, de este maravilloso "sucesor" de una de las grandes leyenda segueras.

Entrando ya en juego. Y dejándonos llevar por su ritmazo y su fluidez. Lo primero que quiero contaros que Bomb Rush Cyberfunk es más que un sucesor espiritual del juego en que se inspira. Este establece su propia identidad, sus conceptos y estilo. Que los consiguen hacer único y realmente fresco. Llevándonos a cantidad de ideas, y a un mundo de lo más ágil y divertido.

Y es que Bomb Rush Cyberfunk, ya nos sorprende desde su inicio narrativo. Donde nos vemos inmersos en una audaz y frenética fuga de prisión. En la que tomamos el papel de Faux antes de perder literalmente la cabeza. Acercándonos a las primeras mecánicas básicas del juego, donde el control, el sistema de combate, y los grafitis van a formar parte importante de esta base.

Pero pese a un duro final de esa huida, y para sorpresa nuestra... no hemos "perdido la cabeza". Sino que la tecnología actual permite ponernos una cabeza cibernética que nos lleva a ser Red. Y nos planta en la misión de conocer New Amsterdam y sus particulares gentes, en busca de nuestra desaparecida cabeza original. Empezando con ello a ver y disfrutar de la estructura y el diseño de esta ciudad tan adaptada para vivir en la calle entre pintadas y zonas que recorrer patinando. Centrando gran parte de la experiencia en una base central, que nos vale de nexo de entrenamiento, personalización, y misiones para nuestro equipo de protagonistas.

Porque está claro que no estaremos solos. Ya que tendremos la ayuda y la amistad de dos jóvenes bastante bien equipados para realizar acrobacias con su bmx o sus patines. Creándose varios caminos de actuación y acción dentro de la aventura.

Y es que en este punto es donde descubrimos el potencial de Bomb Rush. Un juego que nos da una libertad y una creatividad realmente pasmosa. Permitiendo disfrutar a nuestro ritmo; entre secciones de pura habilidad y virguerías acrobáticas, y momentos que nos acercan a esa obsesión por dejar nuestra marca grafitera que se siente como un pequeño juego aparte. Siendo muy divertido el concepto de marcar territorios, luchar contra otras bandas, o el dar sentido a diferentes, en tamaños y conceptos, grafitis que evolucionan con el tiempo. Y que nos plantean pequeñas batallas territoriales que le dan mucha vida al juego.

Todo esto nos lleva a unos niveles muy bien planteados. Llenos de curiosidades y elementos que buscan dar rienda suelta a nuestra creatividad, a nuestra habilidad, y ante todo, a nuestra forma de entender esa libertad absoluta a la hora de disfrutar de ellos. Y es que el diseño de New Amsterdam está muy bien pensado. Introduciendo estructuras, barandas, escaleras, paredes, decenas de objetos de los que disfrutar, Haciendo que la experiencia sea una constante capacidad de encontrar opciones con las que experimentar, y llenar nuestra partida de energía y espectacularidad.

Pero claro está, que todo esto conlleva un problema de descontrol y caos, que va a necesitar de que intervenga una policía tecnológicamente muy avanzada que va a ser nuestro principal "enemigo". Y que con unas características y potencial bien diferenciado suponen un nuevo integrante en la fórmula, y con ello la necesidad de conocimiento dentro de los esquemas jugables que este mundillo no presenta. Y que termina por suponer una propuesta donde tendremos que replantear en muchos momentos nuestra forma de actuar en pos de unas necesidades realmente únicas para cada personaje, enemigo, o situación. Haciendo de esta, una aventura amena, divertida y llena de posibilidades. Que nos permite llevarlo todo a nuestro rollo, y darle ese toque único de estilo que nos sale muy de dentro.

Todo ello bajo esa curiosa historia y guionización entre de Red y Faux. Una cantidad de contenido que atraerá a jugadores que busquen el desafío y el completísmo. Todo fusionado con ese desafío de saber aprovechar lo que un planteamiento tan abiertamente personalizable y libre es capaz de aportar a nuestra vida de patinador grafitero.

Por cierto, recordad que los amigos de Meridiem Games han puesto a la venta una edición física para todos aquellos amantes del coleccionismo.

Conclusión

Concluyendo con el análisis de este Bomb Rush Cyberfunk. Deciros que este llega como un interesantísimo homenaje a ese maravilloso Jet Set Radio. Pero con una serie de virtudes y características que le da un aspecto muy suyo.

Un juego que se disfruta mucho por su variedad de situaciones, esa libertad creativa que nos propone, y por unas sólidas capacidades jugables que se dejan querer bajo ese particular trabajo artístico. Y que terminan por hacer de este una exquisita propuesta que si eres fan del mítico juego de SEGA vas a adorar, y si no, es buen momento para adorarlo.