Un regreso a toda velocidad
Ciertamente se ha hecho larga la espera hasta que le ha dado de nuevo a Turn 10 por regresar a la franquicia base del universo automovilístico de Forza Motorsport, y dejar a un lado Horizont. Planteando ante nosotros un simulador mucho más profundo, completo y complejo que esa otra vertiente.
Un juego que sin lugar a duda se ha sabido adaptar a los tiempos que corren tanto a nivel técnico como jugable. Dejando un resultado final realmente notorio como os voy a contar.
Conceptos bases de la experiencia
Forza Motorsport, vuelve a proponer un simulador bastante adaptable a toda clase de jugadores. Donde la competición en variados circuitos reales, la puesta en escena de medio millar de coches de variadas marcas, un sistema de juego, y modificadores mecánicos y estéticos, completan una de las experiencias del motor más complejas y variadas, no solo de la franquicia, sino que del mundo de la conducción digital de los últimos años.
Puntos más interesantes que nos aporta jugablemente
Un juego que comienza dejándonos exhausto por la cantidad de opciones que nos va a ir introduciendo de forma progresiva, tras el paso por tutoriales de conducción y gestión de vehículos. Siempre tomando como base esas posibilidades casi infinitas de adaptar la conducción a cada jugador, con ese clásico sistema de ayudas que hacen más sencillo el manejo.
Una conducción que como era de esperar es toda una gozada para nuestros sentidos. Viendo cómo todo reacciona a la perfección a nuestros mandos. Con un sistema de físicas muy potentes, que transmite a la perfección no solo el movimiento del coche, sino que además todas las sensaciones de velocidad, del terreno, o de las condiciones climáticas o materiales que nos rodean. En general, un juego sólido a más no poder dentro de esas cualidades de transmisión de sensaciones que podemos tener con un coche.
A nivel de contenido, y más allá de ese medio millar de coches. Deciros que me parece correcta la cantidad de modos de juego que se han incluido, pero tampoco para quedar extasiado por su originalidad. Habiéndose planteado un modo libre. Un modo de eventos donde nos la jugamos con una clásica sombra. Un modo clásico donde encontramos variadas carreras. Y un esperado y bien acabado modo online, con cantidad de opciones de personalización para crear partidas con amigos o más generales. Sabiéndose que se irá añadiendo nuevo contenido de forma digital, del cual pronto veremos qué novedades van planteando.
Por cierto, me ha parecido curioso, pero la verdad que algo inútil ante tanta variedad de coches, la inclusión de un sistema de subida de niveles por utilización del vehículo. El cual nos desbloquea piezas y complementos para este. Pero claro... son muchos coches para tener que centrarse sólo en uno.
Por último, y tras entender lo genialmente adaptado que está en sensaciones y controles, toca ponernos sobre la pista tras haber adaptado todo a nuestra conducción. Queriendo reseñar con fuerza el buen trabajo que se ha planteado con la forma de actuar y la inteligencia de nuestros competidores. Teniendo una forma de conducir bastante competitiva y dura. Buscándonos siempre las vueltas para dejarnos encerrados, bloqueados, o obligados a maniobrar bruscamente... la verdad que en ciertos momentos demasiado agresiva. Eso sí, como pasa con la conducción, esta es muy adaptable a nivel de comportamiento y dificultad.
Conclusión
Concluyendo con este análisis de Forza Motorsport. Tengo que terminar diciendo que me he topado con un retorno a la altura de una franquicia que es un mito dentro de los juegos de conducción. Un juego que vuelve a mantener esa calidad tanto técnica como jugable que siempre ha marcado a la franquicia. Con una solidez en cuanto a su trabajo de adaptación de las sensaciones sobre el asfalto que vuelven a ser geniales. Y ante todo, sobresaliendo por unas capacidades de adaptabilidad a cualquier tipo de jugador que es para quitarse el sombrero. Ya que con ello consigue que una obra de tal magnitud llegue y satisfaga de la misma manera a noveles como a veteranos, o a los amantes del juego arcade como a los de la simulación. Haciendo del retorno de Forza Motorsport un nuevo hito dentro de su ya extensa y sobresaliente saga.