Explicación sin spoilers de la primera temporada de Better Call Saul
Breaking Bad es una de las series de más calidad (y de las más populares) que ha dado la ficción televisiva en los últimos años. Quizás en toda la historia. Todos recordamos a Walter White en calzoncillos o a Jessie Pinkman corriéndose una de sus múltiples fiestas, pero esta gran serie gozaba con la presencia de otro gran personaje, en un escalón más secundario: Saul Goodman. Un personaje que siempre nos dejaba escenas diferentes y rebosantes de carisma y originalidad, por lo que se ganó un más que merecidísimo spin-off.
Un spin-off, para quien no lo sepa, es una serie que se basa en un personaje o en una trama de una serie anterior, en este caso, de Breaking Bad. Como Cleveland Show es un spin-off de Padre de Familia o, en términos españoles, Aída de Siete Vidas. Los spin-off suelen darse a personajes carismáticos y que su papel en la serie "madre" puede dar para una serie en sí misma. Así ha sido en el caso del abogado de la serie Breaking Bad. Better Call Saul pertenece a la misma cadena que emitió la serie de Heisenberg: AMC. En España podemos seguir la serie por Movistar Plus Series. Otro punto en común (y para mi punto clave) es que los creadores en este caso vuelven a ser Vince Gilligan y Peter Gould.
Better Call Saul es una precuela de Breaking Bad, eso quiere decir que se sitúa en un punto argumental anterior al de la serie original. Concretamente está ubicada en el año 2002, muy lejos aún de cruzarse con Walter White y Jesse Pinkman. En este punto Bob Odenkirk aún no era conocido popularmente como Saul Goodman. El actor, en la primera temporada de la serie, interpreta a Jimmy McGill, un mediocre abogado de Albuquerque que sólo visita los juzgados para ejercer de abogado de oficio, es decir, para defender a los delincuentes que no quiere nadie, no gana ni para pagarse el aparcamiento de los juzgados y su tiempo libre lo dedica a hacerse cargo de su hermano. Lo interesante de esto es que podremos ver la evolución del personaje como vimos la de Walter White, con un elemento diferenciador: Walter White se convierte en Heisenberg y en un criminal por su ego y la grandeza que eso le proporciona. Jimmy McGill no quiere convertirse en Saul Goodman. Jimmy McGill quiere hacer el bien. Todos sabemos que eso no será así y lo que nos mantiene pegados delante del televisor es la curiosidad de saber por qué ocurre.
Uno de los puntos fuertes de la serie es que ha encontrado el equilibrio entre los estilos de comedia, drama y, hasta cierto punto, una serie de abogados. Eso, en parte, se debe al buen hacer de sus actores. Los creadores de la serie saben que uno de los puntos fuertes de Breaking Bad fue que Walter era el centro de todo, pero estaba muy bien escoltado por secundarios muy potentes que aguantaron muy bien la serie durante sus 5 (o 6) temporadas. En Better Call Saul ocurre algo parecido. Jimmy McGill es el eje, pero sin personajes como Mike o Chuck la serie no valdría ni la mitad. Sí, efectivamente es lo que estás pensando. Este Mike es el mismo Mike Ehrmantraut que interpreta magníficamente Jonathan Banks en Breaking Bad. Es un personaje principal de Better Call Saul al que conocemos como el taquillero del aparcamiento del juzgado pero que poco a poco vamos conociendo los asuntos turbios de su pasado. Al igual que con Saul, es interesante saber cómo el personaje pasa de taquillero a matón a sueldo. Chuck McGill es el hermano de Jimmy. Un abogado de mucha reputación que sufre una "enferemadad" que le impide estar cerca de aparatos electrónicos y, consecuentemente, ejercer su profesión. Durante la serie vemos que ejerce de conciencia de Jimmy, quién lo considera un pilar y ejemplo. Por otro lado tenemos a Kim, amiga y defensora de Jimmy. Sin embargo ejerce de abogada en HHM, colegio de abogados presidido por Howard Hemlin, personaje prepotente y archienemigo de Jimmy.
Reconozco que cuando supe de la existencia de este spin-off una tremenda pereza me invadió por dentro. Breaking Bad destacó por ser una serie que terminó con sus tramas muy bien ligadas y no sabía realmente por dónde saldrían. Sin embargo, una vez terminada el último episiodio de Better Call Saul, me levanté, aplaudí y seguí haciendo spam en mi twitter para que le dieran el Emmy al mejor drama del año. Se lo merece y con creces.
Porqué si tienes un problema, mejor llama a Jimmy McGill. Él te contará los suyos y te sentirás mucho mejor.