Un veloz arcade retro
Que rápido pasa el tiempo desde que pude disfrutar de ese pequeño juego de clara inspiración retro, que bajo el trabajo de ViJuDa, me recordó momentos mejores en lo que a los juegos arcade de conducción se refiere. Aquel juego se llamaba Woden GP.
Un juego particular, que me dejó con ganas de más. Y que ha terminado desembocando en está esperada y agradecida segunda entrega, que he gozado con muchas ganas, gracias a su simpleza y sensaciones. Volviendo a toda velocidad a sobresalir en un género tan tremendamente divertido.
Un juego que marca su potencial en lo bien medida que está nuestra evolución, avance y desbloqueo, de las diferentes opciones, competiciones, y vehículos que nos propone un juego. Dejando claro que nuestro esfuerzo por conducir bien y ser competitivo, nos irá recompensado a base de cantidad de contenido.
Todo ello nos pone sobre un mapeado esquemático. Donde veremos una serie de opciones y zonas, tanto a nivel de competición, modos de carreras, y de garajes para nuestros coches. Donde veremos como los primeros conceptos a nivel de dinero y estrellas, nos irán haciendo tener claro nuestros objetivos a cumplir para abrirnos un completísimo catálogo de coches como de circuitos. Ya que cada uno de ellos tendrá unos valores fijados para ser desbloqueados. Y que ciertamente me han parecido muy bien medidos, para que todo fluya a la perfección, y siempre estemos motivados con nuevas posibilidades.
Una vez al volante de nuestra primera compra automovilística entre las variadas marcas ficticias bastante clásicas, donde podremos ver las características a nivel de velocidad, agarre, o manejabilidad de cada coche, empezaremos a disfrutar de los diferentes modos de juego. Siempre antes pudiendo pasar por algunas sencillas modificaciones estéticas muy simples.
Entrando ya en la chicha de las carreras os empiezo nombrado un primer modo arcade. Que viene directamente concebido de las máquinas recreativas. Y donde un concepto de modo contrarreloj entre un punto a y uno b, nos pondrá sobre una serie de circuitos a superar siempre dentro de unos límites temporales, e intentado además hacer una buena marca. Siendo curioso ese concepto de continúes cual máquina recreativa.
Por otro lado están las competiciones. Una serie de eventos con varias carreras en su interior, con un ranking propio hacia un podium final para el que mejor lo haya hecho. Y que como todo en el juego, nos irá aportando estrellas y dinero para desbloquear una ingente cantidad de nuevas competencias. Cada una de ellas con ciertos factores técnicos que van a depender de los vehículos que tengamos, más allá siempre de que la hayamos desbloqueado.
Tampoco puedo dejar de nombrar zonas como la de rally, eventos o la de resistencia. Donde la duración y gran ranking nos irá posicionando y abriendo nuevas posibilidades entre un amplio número de jugadores a nivel mundial. Y que vuelve a ser un gran punto de recogida de dinero y estrellas. Todo ello acercándonos a un garaje donde dar un toque personal a nuestro coche, entre las casi dos centenas que podremos adquirir de diferentes maneras.
Tampoco quiero dejar de hablar en este apartado, de un punto tan importante como es el propio control. Y es que Woden GP se controla con mucha facilidad, pero con necesidades de práctica para hacernos con las diferentes necesidades que los muy bien planteados circuitos nos proponen. Y es que nos encontramos de nuevo con una conducción desde una perspectiva aérea, donde con solo dos botones en cuanto dirección, y uno para acelerar y otro para frenar, nos va a ser más que suficiente. Eso sí, un muy buen sistema de físicas, inercias y derrapes, hacen que cada curva, cada choque, e incluso cada terreno, suponga unas necesidades de adaptación y concienciación por lo que respecta a nuestra forma de conducir, y las características de cada coche. Así que tened paciencia al principio, porque luego lo vais disfrutar mucho, ya que posee una conducción frenéticamente divertida.
Conclusión
En definitiva, y cerrando este análisis de Super Woden GP 2. Solo me queda alabar el trabajazo que se ha tenido que pegar este único diseñador con esta nueva entrega. Un juego que se goza en cada curva. Que sabe tocarnos la fibra sensible gracias a su diseño tanto visual como mecánico. Y que termina por sobresalir gracias a su gran cantidad de circuitos, modos y vehículos.
Un juego genial, que disfrutarán mucho los amantes de los juegos arcade de conducción de toda la vida. Sabiendo transmitir sensaciones que nos trasladan a otros tiempos donde todo era más sencillo, directo y divertido.