Una bombera dura de pelar
La buena gente de Dejima, bajo el sello de Thunderful Publishing. Nos traen una ardiente y frenética aventura. De esas que no nos dan un segundo de respiro. Que nos la intenta jugar en cada rincón que recorremos. Y que nos mantiene una sonrisa en la cara, siempre tras esas ganas de lanzar el mando por la ventana por lo complejo de la cosa.
Y es que FireGirl, ha sido una experiencia digna de mención. Compleja de expresar. Y difícil de dominar. Que sin ser un juego perfecto, tiene un encanto especial. Del que veo un más que necesario un análisis, para una curiosa y compleja aventura, que seguro que no os dejará indiferentes, aunque si algo quemados en muchos sentidos.
NOTA: 7
Entrando sin demasiados preámbulos al juego. Deciros que estamos ante un juego donde las plataformas, la exploración frenética, y el rescate de personas, en los peores y más ardientes escenarios que te pueda hacer a la idea, será nuestra principal misión.
Y es que FireGirl nos pone en el papel de una joven bombera. Que tomando como base central la estación. Y tras un grabe incendio en esta misma. Tendrá que reconstruir las instalaciones y contratar personal gracias a lo que vaya consiguiendo sacar de cada una de las misiones de rescate que se nos irán encomendando. Y en la que a lo largo de escenarios que nos llevan a edificios, bosques o trenes, tendremos que dar con estas victimas antes que el tiempo se nos termine.
Una idea realmente divertida. Que consigue introducir una serie de mecánicas sencillas en concepto. Donde el ir apagando llamas. Deambulando por las zonas que se están derruyendo. Y consiguiendo encontrar persona, animales atrapados, y otros objetos, es una autentica delicia que fluye ante nuestros ojos. Y que bajo un control accesible, consigue llevarnos rápidamente a empatizar con el juego.
Por desgracia. Y empezando más agorero de la cuenta. El juego sufre de c iertos puntos que no terminan de encajarme con la jugabilidad. Y que en muchos momentos lastran la experiencia. Uno de ello, puede ser la constante confusión que uno tiene dentro de los escenarios. No solo costando encontrar los objetivos bajo ese estrés, sino que además la cantidad de objetos en pantalla, los efectos, y la cámara, consiguen que no distingamos los caminos e inclusos los enemigos. Siendo un caos en muchos momentos.
Además, hay que señalar que l os escenarios se generan de forma aleatoria. Y pese a tener un buen diseño,hay que tener realmente suerte con ellos. Ya que la colocación de enemigos o los propios accesos a diferentes zonas, pueden hacer partidas terriblemente complejas, y otras que sean un paseo. Pese a ello, no es un juego que castigue mucho al jugador. Ya que el morir solo nos supone repetir y repertir hasta que demos con la partida buena.
Unos enemigos variados y fantasiosos, dentro de que estamos luchando contra llamas... Con variadas mecánicas, y diferentes cualidades, que nos obligan a pensar rápido el como actuar con ellos. Y que junto a los demás desastres que rodean a las diferentes ubicaciones, nos pueden suponer un dolor de cabeza. Aunque también nos supondrán una ayuda gracias a que la muerte de cada uno de ellos, nos supone la suma de algo más de tiempo para nuestro contador.
Eso sí, para ello contamos con n uestra manguera y nuestra hacha. Los dos elementos principales para luchar contra el fuego, y para abrinos paso en estos lugares. La manguera goza de una capacidad y una potencia. Cosa que nos obliga a recargarla. Y donde sus capacidades de impulsarnos en vertical, o aguantarnos en las caídas, son muy divertidas y originales. Por lo que se refiere al hacha. Esta se centra en abrir paso entre puertas y escombros, aunque tendrá un pequeño y fogoso giro de tuercas. Todo ello unido a que en cierto momentos, gracias a los diferentes potenciadores y mejoras, que podremos realizar en nuestra central gracias a los empleados que iremos contratando, los fans y el dinero que consigamos tras cada misión, podremos mejorar nuestro equipos y nuestras propias posibilidades de carga, potencial y vida.
Por cierto, unas misiones entretenidas, con conceptos con ciertos tintes narrativos. Que nos mete en el papel de esta jovencita bombera, un parque de bomberos bastante especial, y la política de la ciudad. Que hace de la historia un mundo muy divertido. Con unos personajes muy particulares. Y con esos tintes humorísticos, sarcásticos, a la vez de crueles, que tanto suelen gustar.
A nivel visual es juego es una autentica delicia. Con un pixel art lleno de vida. Con muy cuidados decorados, y un genial diseño de personajes. Todo ello adornado con unas geniales animaciones, y variedad de efectos en pantalla y sensaciones profundidad que, crean escenas realmente chulas. Además, el trabajo de iluminación, de partículas y de fluidos, también es de admirar. Eso sí, el juego sufre de algunas bajadas de framerate, que espero que con el tiempo sean pulidas.
Por lo que se refiere a la parte sonora. Esta destaca por unas melodías que le dan agilidad e intensidad a las diferentes situaciones de estrés. O a aquellas en la que estaremos más reposados en la estación. Además a todo ello se le unen unos correctos efectos sonoros, una buena ambientación y, unos t extos en español que siempre se agradecen.
En conclusión. Deciros que la experiencia que he tenido con FireGirl ha sido algo confusa. Y es que detrás de un juego donde la simplicidad y la diversión podría estar por bandera. Me he chocado con cierto puntos y decisiones que rompen bastante la experiencia. Y que supone pasar de momentos que adoras a momentos que odias y te sacan de quicio, pero normalmente no por tu propia culpa.
Pese a ello, FireGirl es una grata sorpresa. Un juego divertido, original, y realmente bonito a nivel técnico. Y que seguramente sea de esos juegos que habrá dos clara vertientes de jugadores a nivel de opinión.
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