ANÁLISIS: Fortnite

Publicado el 19 agosto 2017 por Raúl Vázquez Santos @Generacionpixel

Epic Games regresa al mundo de los videojuegos, con un producto que se sale en cierta medida de lo que han sido capaces de mostrarnos hasta ahora, pero que a su vez bebe muy directamente de pequeñas experiencias que nos hicieron vivir en su ya grandes clásicos.

Fortnite es el nombre del juego, y os aseguramos que nos ha hecho pasarlo muy bien, que nos ha hecho soltar alguna que otra risa, y ante todo, que ha conseguido que la cooperación y el charloteo entre amigos pueda ser llevado a limites bastante insospechados con tal de sobrevivir a un mundo que como suele ser normal se ha ido al garete.

ANÁLISIS

VERSIÓN DISPONIBLE

XNOX ONE – PS4 – PC

VERSIÓN ANALIZADA

XBOX ONE

DESARROLLADOR

EPIC GAMES

DISTRIBUIDOR

KOCH MEDIA

VALORACIÓN

7

NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS

El concepto básico del juego es bastante sencillo, y se divide principalmente en dos partes muy diferenciadas. Por un lado la parte de recolección y construcción de un refugio. Y por otro lado, el combate y aguante de oleadas y oleadas de monstruos de todo tipo, formas y colores. Y todo bajo el concepto argumental en el que una tormenta llega a la tierra y la destroza casi por completo, quedando solo algunos supervivientes que deberán de sobrevivir a este nuevo peligro cuando la noche cae sobre ellos.

Entrando más de lleno en los conceptos anteriormente nombrados, empezamos haciéndolo por la recolección. Esta nos lleva a la utilización del típico pico, que tan de moda está en los últimos años. Con el cual, y a base de golpear los diferentes objetos del mapa podremos conseguir; madera, piedra o piezas metálicas, con las cuales podremos pasar a la siguiente fase conceptual del juego, la construcción.

Una fase en la que nos centramos en utilizar los diferentes materiales conseguidos en construir toda clase de estructuras, trampas y defensas para ser capaces de sobrevivir una noche más. Y donde una zona llamada escudo antitormentas será la parte donde tendremos que realizar todas nuestras maniobras para ello. Maniobras que nos llevan desde estructuras meramente defensivas como paredes o puertas, a otras que se centran en hacer polvo todo lo que se acerque a la base, y en la que nos encontramos maquiavélicas trampas.

Llegado el momento de comenzar a recibir enemigos, el concepto jugable cambia por completo. Convirtiéndose en un shooter en tercera persona de lo más alocado. Y es que con las defensas no tendremos suficiente, por ello tendremos que tirar de nuestras habilidades armamentísticas para ser capaz de atajar dichas hordas. Hordas que intentarán acabar con nosotros de la forma que sea, pero que se centran especialmente en nuestra base o en una serie de dispositivos que estarán repartidos por todas las partes del mapa, y que nos obligarán a centrarnos en cierta parte de exploración que también posee el juego.

Por cierto, olvidaros de sufrir las hordas en silencio, ya que si tiene algo divertido este juego es jugarlo con amigos. Poseyendo un modo cooperativo online, en el que junto a una serie de personas tendremos que coordinarnos para montar la mejor base posible. Y en el que el entendimiento con los demás compañero será esencial, cosa que no pasa tan a menudo si nos encontramos en una partida con otras personas que no entran a ello.

Personas que podrán escoger entre cuatro tipo de héroes; un soldado, un ninja, un constructor y un trotamundos. Cada uno de ellos con unas habilidades específicas, las cuales podrán ir mejorando gracias a un sistema de experiencia que funciona correctamente y le da ese toque rolero que tanto gusta y engancha.

Por el resto decir que nos encontramos con un juego muy divertido, ante el cual echar muchas horas de juego, y en el que se disfruta mucho más con amigos. Eso sí, una vez llegado ciertos niveles todo se vuelve algo mecánico y repetitivo, a lo que hay que unirle que el interface puede resultarnos algo lioso, sintiéndonos alguna vez frustrados por querer pegar un tiro y terminar colocando una pared.

En lo que se refiere a la parte gráfica, nos encontramos con un juego con estética cartoon, lleno de detalles humorísticos, y donde nos movemos por grandes escenarios algo simples. Donde por desgracia nos hemos encontrado con bajadas de framerate, especialmente cuando los efectos y la dosis de enemigos son demasiado grandes. Los personajes tienen un diseño simpático aunque no muy original, echando falta en ellos unas mejores animaciones.

Por otro lado, la parte sonora del juego. Donde nos encontramos con una correcta aunque bastante simple y llamativa banda sonora, que es acompañado por unos efectos sonoros bien implementados. A ello hay que unirle el doblaje de las voces al ingles, y unos siempre agradecidos textos al castellano.

NUESTRA OPINIÓN FINAL

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En definitiva, solo nos queda concluir diciendo que nos hemos encontrado con un juego muy divertido con amigos. Que combina a la perfección una parte de construcción con otra de acción que se fusionan haciéndolo la mar de bien.

Eso sí, otros detalles más profundos consiguen que nos terminemos encontrando con un juego que a la larga se vuelve monótono por causa de repetir siempre lo mismo, a lo que negativamente le acompaña un apartado técnico bastante simplón.

Pese a ello, se disfruta mucho con amigos, y consigue que nos echemos unas risas entre que nos organizamos para matar hordas de seres de otro mundo, cosas que jamás puede ser aburrida.

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