Análisis Gamer | Prince of Persia (1989), para PC, Smartphones y Tablets

Publicado el 27 septiembre 2013 por Mientraslees

Antes de nada: ¿Cuál es el primer Prince of Persia? Lo más probable es que muchos hayáis pensado en el Sands of Time, pero… ¿Es eso cierto? Como denota el título, la respuesta es no; el primer juego de esta gran saga salió en el año 1989, desarrollado por Broderbund. ¡Y hoy os presentamos su reseña!

Desarrolla: Broderbund
Distribuye: Konami
Género: Plataformas
Subgéneros: Aventura
Lanzamiento: 03/10/1989
Voces: No hay
Texto: Inglés
Plataforma: PC (en disquete) y smartphones/tablets


Mucha gente cree el primer Prince of Persia es el Sands of Time del 2003 porque es relativamente “antiguo”, y aunque la historia no está muy relacionada con el primer juego, es el primero de la saga al que dedicaron una película (Prince of Persia: Las arenas del tiempo, protagonizada por el famoso actor Jake Gyllenhaal y dirigida por Mike Newell en mayo del 2010).
Sin embargo, todavía hoy, tras casi 25 años de su estreno, yo sigo opinando que este, Prince of Persia (1989), es uno de los juegos más épicos de la Historia, respecto a la música, la corta pero curiosa trama, la sencillez del personaje (que, por cierto, no se indica siquiera su nombre), los complicados y enigmáticos niveles…
Creo que es un juego muy bueno y recomendable para todo tipo de público y sin importar edades, ya que aunque parezca sencillo y simple, tiene 12 complicados niveles en los que no bastará solo tener habilidad, sino que requiere lógica y memorización y asegura una hora de entretenimiento, ya que ese es el tiempo que se te proporciona para llevar a cabo tu misión.
En ésta, el malvado visir Jaffar está luchando por hacerse con el poder del reino ya que el sultán está librando una batalla en un país vecino. La princesa e hija del sultán es la única que puede impedir que esto pase, por eso, Jaffar la encierra en una torre a lo alto del castillo, jurándole que si no se casaba con él, la mataría pasada una hora exacta.
Nuestro personaje, la pareja de la princesa, es un joven atlético, rubio y vestido con un mono blanco al que han encerrado en las más escondidas mazmorras del castillo y que hará lo que sea posible para que la princesa salga sana y salva. Está ambientado (como no) en la antigua Persia aunque no se puede apreciar mucho ya que apenas podemos ver escenas que no sucedan en las mazmorras donde se halla nuestro héroe y donde, por cierto, se esconden muchos secretos invisibles a simple vista.
Algo que me encantó del juego y me pareció muy original y curioso fue cuando el personaje se encuentra con su “doppelgänger; lo que al principio parece un enemigo, pero resulta ser una aparición de su propia persona en espejo, que imita nuestros movimientos, haciéndonos creer que se trata de alguien peligroso ya que nuestra primera intuición es atacarle, y él, como no, hace lo mismo.
Admito que morí varias veces intentando acabar con ese ser oscuro ya que perdía la misma vida que le quitaba, hasta que al final me di cuenta de que repetía todos mis movimientos y la única forma de superar ese nivel es ir corriendo hacia él (mientras hace lo mismo contigo) hasta que llega el momento de que sus cuerpos chocan y se unen, devolviéndote al personaje principal ileso y con sus “dos partes” dentro de él. Creo que este es el primer juego en el que vi que un personaje se tuviera que enfrentar a él mismo, ya que posteriormente he ido encontrando algunos en los que sucede algo parecido como el Kingdom Hearts, Final Fantasy, Mario Bros, Star Fox, Kid Icarus, el cómic de X-Men, Spiderman
Hace un tiempo, encontré el viejo disquete del juego y recordé todas esas horas invertidas en él y pensé en lo que daría por volver a jugar. Poco después, Gameloft, como si hubiera oído mi súplica, sacó una versión para smartphones y tablets con mejores gráficos pero con la misma esencia, historia y niveles al que llamaron “Prince of Persia Retro” y que está disponible por el precio de 0’79 euros.
Algo que debo decir que no me convenció mucho es el hecho de que en estas versiones no tradujeran el texto del juego; solo el menú, pero no la historia que se presenta en forma de diapositivas con breves textos en inglés. Hay que decir que es muy fácil de entender aunque sea con un nivel básico de inglés y que encontramos muy pocas de estas diapositivas.
Sigo repitiendo que es un juego al que vale la pena jugar ya que no se hace muy largo, es sencillo pero a la vez complicado, entretenido, divertido y muy nostálgico, al menos para mí, ya que fue al primero al que jugué cuando era niña. Ahora que ha salido la versión de Gameloft no hay excusa para no tener esta pequeña joya, ya que antes solo estaba disponible a través de los viejos disquetes de plástico, y actualmente no se fabrican apenas ordenadores que los lean.
El tiempo de juego es algo relativo ya que te dan una hora real para pasártelo entero, si no lo logras en ese tiempo o dejas de jugar antes de acabarlo, empiezas desde el nivel 1. Sinceramente, no es fácil pasarlo todo en una hora. Los controles son sencillos ya que no hay muchas opciones de movimiento que no sea saltar, andar, correr y golpear, así que no hay que memorizar muchas teclas, cosa que nunca viene mal.
El juego se basa en avanzar mediante plataformas situadas en las mazmorras del castillo, muy parecidas todas y a veces muy, muy laberínticas. Los gráficos son algo que no se puede cuestionar ya que estamos hablando de un juego del año 1989 y, obviamente, sus efectos no son gran cosa, pero admito que están muy logrados los movimientos de los personajes, sobretodo al saltar y atacar; son bastante realistas. Eso sí, la nariz de cada persona es un simple píxel en medio de la cara.
En conclusión: es un gran juego que vale la pena probar, sobre todo a los amantes de juegos 2D y de plataformas, aunque se lo recomiendo a cualquier amante de los videojuegos ya que así se puede apreciar el avance que han hecho en unos pocos años y, como no, se lo recomiendo a cualquier amante de Prince of Persia que no haya jugado todavía a esta pequeña y apenas conocida maravilla.
Lo mejor: Realmente entretenido, enigmático y para todas las edades y públicos.
Lo peor: Ninguna versión se halla completamente en castellano y aunque su duración aproximada es de 60 minutos, puede resultar un poco corto.
Puntuación: 8/10

Julia
Júlia Bisbal es una joven estudiante de Menorca entusiasta de la lectura desde pequeña, del cine y los videojuegos. Gran amante del rock de las décadas 70’ y 80’ y le entusiasma tocar la guitarra. Sus más destacables hobbies son la hípica y el windsurf y le encantaría dedicar su vida a la literatura.