ANÁLISIS: Godstrike

Publicado el 19 abril 2021 por Raúl Vázquez Santos @Generacionpixel

Dioses y balas por todas partes

El estudio madrileño independiente OverPowered Team. Bajo el sello de Freedom Games. Me ha dado la posibilidad de disfrutar estos días de una de las experiencias más estresante y duras que ha sufrido mi maltrecho cuerpo gamer en los últimos tiempos.

Y es que ha sacado a la luz su nuevo proyecto, llamado Godstriker. En el que se nos plantea un juego de acción realmente frenético y complejo, que puede hacer desesperar al más paciente, y que tras una buena cantidad de horas con ganas de tirar el mando contra la pantalla os voy a destripar con mucha más tranquilidad de la que el juego a plasmado sobre mi ser.

NOTA: 7'8

Y es que jugablemente Godstriker es un juego de acción en 360o. Donde tendremos luchas constantes contra grandes jefes en escenarios cerrados. Donde un sinfín de proyectiles, ataques demenciales, y potentes y variadas mecánicas. Nos van a poner en un estado de estrés por sobrevivir a una experiencia frenética y muy compleja. En la que un sistema de combate y unas situaciones de esquiva y movilidades muy bien acabadas, consiguen hacer de Godstriker una buena experiencia para los amantes del sufrimiento más extremo.

Quizás el punto más importante dentro del tipo de juego que se plantea, es su control. Y es que este nos lleva a disfrutar de una experiencia con perspectiva aérea. Donde la movilidad y disparo de doble stick es su ágil base jugable. Y la que se le incorpora una serie de habilidades y poderes extras al que accederemos con facilidad mediante los gatillos y una fácil personalización. Consiguiendo que la adaptabilidad y la reacción al control sea ágil y rápida, ya que el juego no nos va a da tregua ninguna. Y ciertamente Godstriker lo consigue.

Una vez entendido el control. Y personalizado nuestro personaje mediante los diferentes poderes y habilidades que iremos adquiriendo. Toca entrar en los campos de batalla. Y es que el combate contra grandes jefes será el concepto principal del juego. Metiéndonos en imponentes combates, entre cientos de balas, demenciales ataques, e imponentes situaciones, que deberemos de estudiar y reaccionar con inteligencia. Y donde el entender el comportamiento enemigo, y saber contrarrestar mediante nuestro potencial y movilidad será realmente importante para poder salir de un autentico infierno.

Y todo ello, y para más sufrimiento. Se irá conectado a una particular barra de vida, que tiene como lastre de que ella se conecta a la misma vez al tiempo que tendremos para acabar con el enemigo. Creando un cúmulo de estrés y sufrimiento que se plantea de forma interesante, pero que puede llevar a la desesperación al jugador. Ya que no tendremos respiro ninguno. Y si ya es complejo estar pendiente del enemigo, de sus ataques y de lo que queda de vida... esto riza el rizo.

El juego, como ya os imagináis, es realmente difícil desde los primeros compases. No dando ni un pequeño margen para adaptarnos a sus mecánicas. Que pese a ser entendida con suma facilidad. Nos impone una necesidad de agilidad y maniobrabilidad que será imposible adquirir tan rápido, y que seguramente nos va a poner realmente a prueba nuestros nervios desde el primer segundo de juego.

A nivel narrativo es cierto la cosa no da para mucho. Ya que nos plantea, de forma bastante bien introducida, un mundo donde tomamos el papel de la última de las siente máscaras de Dios en el papel de Talaal. Viéndonos metido de lleno en la casi infinita lucha contra sus demás hermanas con el único fin de hacerse con el poder. Una puesta en escena y unas bases que ayudan a entender el mundo. Pero que poco más evolucionan y aumentan un guion que más centrado en darnos un objetivo y un universo que en expandirse y evolucionar hacia algo.

Desde el punto de vista gráfico es un juego bastante interesante. Con un diseño minimalista y simplista. Que destaca más por la cantidad de objeto en pantalla, los efectos variados, y la fluidez con la que se mueve, que por el propio diseño de personajes y escenarios. Que, sin ser malos, tampoco son especialmente llamativos.

Por otro lado, la parte sonora si está bastante bien llevadas. Con una capacidad de ambientación y de implementación tanto de la banda sonora como de los variados efectos, que consiguen meternos de lleno y acelerar nuestro ritmo cardiaco, más aún, de una forma muy bien traída. Y en la que la inclusión de textos en español siempre se agradece.

En conclusión, deciros que me he topado con una más que grata, aunque realmente desesperante experiencia arcade. Que consigue traer un juego de pura acción, de mucha habilidad. Solo para persona que tengan unos nervios de acero, y unas cualidades mentales que les permita aguantar la presión a la que somete el juego al jugador desde el minuto cero, ya que, si no estás preparado para ello, puede que casi ni consigas arrancar en una experiencia particular y original. Así que considero que todo amante de los retos debe de darle una oportunidad, ya que como buen masoquista que es va a disfrutar de uno de esos juegos que lo lleve a la máxima extenuación.

NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS Código digital proporcionado por Freedom Games