ANÁLISIS: Mario Party 10

Publicado el 04 abril 2015 por Raúl Vázquez Santos @Generacionpixel

Llego la hora de que llegara a la sobremesa de Nintendo una nueva edición de su juego de tablero que mezcla el mundo de Mario y decenas de minijuegos para ser disfrutado por amigos en esos momentos de parranda y buen rollismo. Como ya os imagináis, os hablamos ni más ni menos que de la decima edición de Marios Party.

Así que si preparando los mandos, las cervezas, y esos buenos piques que desde hace ya tiempo siempre nos ha dado esta saga, aunque por desgracia esta vez con menos novedades o con una formula más gastada de lo normal, pero que nos sigue gustando mucho.

ANÁLISIS

VERSIÓN DISPONIBLE

WIIU

VERSIÓN ANALIZADA

WIIU

DESARROLLADOR

NINTENDO

DISTRIBUIDOR

NINTENDO

VALORACIÓN

7

NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS

Y es que es raro que no conozcáis las nociones básicas de que trata el mundo de Mario Party, pero pese a ello os lo comentamos. El juego se sale totalmente del clásico mundo de plataformas y coches que nos tiene acostumbrado el amigo fontanero. Trasladándonos esta vez, a un clásico juego de mesa con su tablero, donde los minijuegos y la obsesión por ganar estrellas serán el concepto principal de nuestro disfrute.

El control en general se realiza con los Wii-mote, menos en uno de los modos de juego donde podrá entrar a la palestra nuestro amigo el tableto-mando, siendo el controlador de nuestro colega Bowser. Así que desempolvar vuestros mandos de la Wii que aquí sí que le vais a dar mucho juego.

En cuanto a los tableros, nos hemos encontrado que aunque son divertidos y originales, su corta duración y ante todo su poca variedad, puede lastrarnos la experiencia a largo tiempo. Así que lo mismo le da a Nintendo por sacar un descargable con nuevos.

Dentro de los tableros nos hemos encontrando con todo tipo de casillas, las cuales van desde las clásicas de minijuegos, hasta algunas que llegan como novedad, en la que nos enfrentaremos a jefes finales teniéndonos que poner todos de acuerdo para superarla y con ellos ganar una buena dosis de estrellas.

Eso sí, sabemos que la esencia básica de este juegos es sin lugar a duda los nombrados minijuegos, los cuales se podrán realizar cuando caigamos en algunas casillas especificas, dándonos a escoger (al azar) como será la competencia; 2v2, 3vs1, batallas, etc, y además de ello, el tipo de minijuego entre tres.

Una vez dentro de estos. Nos dará la posibilidad de elegir entre practicar un poco, cosa que siempre viene bien si no entendemos muy bien el concepto del juego. O entrar directamente a la competencia por las ansiadas estrellas.

Por desgracia, el número de minijuegos no es tan amplio como otras veces, y lo peor de todo es que además no sorprenden como lo hacían en anteriores ediciones, habiendo necesitado algo más de chispa creativa para su creación. Pese a ello, se disfrutan y se hacen muy divertidos.

Hablando de estrellas. Estos minijuegos no serán los únicos que nos las den o nos las quiten, ya que a lo largo del tablero encontraremos bonificaciones o penalizaciones. Por cierto, especialmente dañino puede ser la parte final del tablero, la cual nos deparará alguna que otra sorpresita que nos harán que tengamos bastante cuidado por no pasar del ser el primero al último en cuanto a posesiones estrellada. A lo cual hay que sumarle las ya clásicas bonificaciones finales, que siempre pueden cambiar todo si está muy ajustada la cosa.

Por cierto… se ha introducido un nuevo modo de juego en la saga, el Bowser Party. En este, entrará en juego un quinto jugador encargado de controlar a Bowser. En este modo de juego lo único que cambiará será la incursión de este enemigo al cual controlará un jugador mediante el tableto-mando, con la única misión de amargar la vida a los demás jugadores, consiguiendo que estos no lleguen al fin. Además, como punto también muy original, se han creado minijuegos especiales para la ocasión, en donde siempre intervendrá el villano.

En lo que respecta a la dificultad del juego, nos hemos vuelto a encontrar con la pura y mera suerte, y la capacidad que tengamos para adaptarnos a cada minijuego. Así que aquí si tenemos un buen día con los dados está todo más que hecho.

Respecto al apartado multijugador, que es la esencia del juego, os tenemos que recordar que solo se podrá realizar en la misma consola, así que es obligatorio tener a nuestros amigos a alrededor para su disfrute, cosa que se echa en falta en muchos juegos.

Por último hablaros de la inclusión de los Amiibos en el juego, los cuales nos desbloquearán nuevos tableros, y con los que accederemos a recompensas diarias. Además, la forma de jugar será distinta a la principal. Retomando la forma clásicas de cada jugador una figura, lo cual nos ha gustado mucho. Muy divertido y original, lo único malo que necesitaremos comprar Amiibos para que pueda jugar más gente.

Antes de terminar no podemos dejar de hablar del apartado técnico, el cual pese a ser, tanto sonora como visualmente, bastante competente. Tampoco sobresale por nada que podamos destacar, siendo más un mero trámite colorista y simpático sonoramente, que un trabajo artísticamente detallado y preciosista como suele hacer Nintendo.

NUESTRA OPINIÓN FINAL

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En conclusión. Mario Party 10 es un juego divertido, muy recomendado para jugar con amigos en esas noches de buen rollo, pero que se queda corto en cuanto a novedades, modos de juegos e incluso de tableros jugables, a lo que hay que unirle que una inyección de originalidad en la saga debería ser el nuevo objetivo de Nintendo para la próxima edición. Pese a todo, puede que sea el mejor juego de estas características que hay actualmente en el mercado, así que si queréis un juego party, esta es vuestra mejor opción.

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