ANÁLISIS: The Surge

Publicado el 21 mayo 2017 por Raúl Vázquez Santos @Generacionpixel

La tendencia Souls está de moda, y la verdad que en los últimos tiempos hemos tenido buenos productos basados en ello. Juegos que nos han sorprendido, porque pese a copiar en muchos puntos al maestro, han conseguido inyectarle nuevas y mejoradas característica a un género que posee cientos de seguidores amantes del sufrimiento y de esperar la muerte al girar cada esquina.

The Surge, que es al que nos enfrentamos hoy, viene de la mano de ya unos expertos en el género, las buena gente de Deck 13. Un estudio que tubo bajo su creatividad al notable Lord of the Fallen, y que deja a un lado el concepto medieval fantástico para meterse de lleno en un futuro algo atípico, pero manteniendo y mejorando todas las virtudes que ya habían demostrado en el anterior juego.

Así que atentos a las próximas líneas, porque nos encontramos ante una de las sorpresas del año, y un nuevo golpe sobre la mesa de otros equipos de desarrollo que son capaces de traer un género que parecía que solo estaba bajo la influencia de un estudio.

ANÁLISIS

 

VERSIÓN DISPONIBLE

XBOX ONE – PS4  – PC

VERSIÓN ANALIZADA

PS4

DESARROLLADOR

DECK 13

DISTRIBUIDOR

BADLANDS GAMES

VALORACIÓN

8’5

NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS

Empezando por la parte narrativa del juego. Nos encontramos con un mundo totalmente derruido, con una persona que poco sabemos de ella, y ante todo con una gran duda, ¿Por qué estamos allí, y que ha sucedido?. Y es que esa es la premisa principal del juego. No sabremos nada, estaremos desconcertados, y esa preocupación nos hará seguir adelante en busca de respuestas.

Es cierto que argumentalmente no es una gozada, pero si es cierto que consigue mantenernos activos mentalmente, preocupados por saber, y ante todo consigue trasmitir sensaciones confusas sin necesidad apenas de detalles narrativos directamente en texto y en audio, ya que el propio entorno tendrá esa capacidad, si somos observadores, de darnos a entender y conocer detalles del universo en el que nos quiere meter.

Entrando en la parte jugable. Deciros que nos encontramos con un juego de acción y aventura en tercera persona. Donde tendremos que vérnosla por variadas zonas con cantidad de enemigos, enrevesados escenarios, y objetos que nos vendrán de genial ayuda tanto para nuestra defensa o ataque como para la adquisición de nuevas mejoras, como buen juego con tistes roleros que es.

Eso sí, y por encima de todo lo demás, uno de los puntos fuertes del juego es el sistema de combate. Un sistema más basado en el ataque que en la defensas, y donde nos vemos obligado a pensarnos muy bien cada movimiento, ya que la muerte es algo que será habitual por la dureza de los enemigos. Y es que no solo nos encontramos con un sistema donde el golpeo, la guardia y la esquiva forman parte de este, si no que tendremos que estar muy centrado en el blindaje del enemigo, ya que nos permite elegir qué zona del cuerpo golpear, habiendo diferenciación a nivel de resistencia entre las protegidas y las no. Así que la estrategia de combate se vuelve mucho más especial y estratégica de lo que uno se puede esperar.

El control de este es preciso y verdalmente sencillo de absorber, pero complejo de perfeccionar. Encontrándonos con un sistema de ataques de dos botones (potente y débil), y un sistema de guardas y esquivas, eso sí, echando en falta un sistema de contragolpe. Por cierto, dentro del control, tendremos que tener muy en cuenta la barra de resistencia, de la que no podremos quitar ojos ya que es importantísima para poder golpear, defendernos, esquivar e incluso correr.

Pero bueno… el combate no es la única cosa que nos ha gustado muchísimo del juego. A ello hay que unirle el maravilloso trabajo de gestión de equipo que se han montado. Y es que The Surge nos propone el tener el control por separado de cada extremidad de nuestro cuerpo mediante diferenciación tanto a nivel de protección como a nivel de armamento. Y es que este punto nos ha encantado, y más cuando la recolección de este no es solo mediante la clásica rotura de barril. Aquí nos la vemos con los enemigos y sus partes del cuerpo, ya que si vemos que un enemigo tiene, por ejemplo, un brazo que posee un arma que nos gusta, podremos centrarnos en él, y mediante un golpe final, cortarlo y tenerlo en nuestro inventario para arreglarlo y luego poderlo utilizar.

Como es normal en este tipo de juegos, nos encontramos con unas zonas de descanso que nos sirven no solo para restaurar energía y resistencia, si no que a ellas se les une el ser los únicos sitios donde podemos mejorar a nuestro personaje mediante los módulos, cambiar o mejorar nuestro equipo, e incluso servirnos como centro de almacenaje y de información sobre la misión que nos rodea. Eso sí, será pasar por él, y como suele ser normal, se restaurarán todos los enemigos del mapeado… así que pensároslo muy bien.

Por cierto, hablando de pensaros muy bien. Hay que subrayar,  que el juego no se deja tampoco atrás las características almas de los Souls, llamándolas aquí chatarras, y que nos sirven como moneda del juego tanto a nivel de comprar de armamento como de subida de nuestro poder. Teniéndoos que recordaros, que si morimos por el camino, las tendremos que volver a recoger, y si en el camino volvemos a morir, las habremos perdido para siempre. Por cierto… y como novedad dentro de este juego, deciros que nos encontraremos con un marcador de tiempo en nuestra contra, así que la cosas no quedará solo en conseguir regresar a la zona, si no que tendremos un marcador que nos hará que aceleremos el paso.

A nivel de diseño de escenarios nos tenemos que quitar el sombrero con lo que han hecho con este juego. Y es que la interconexión y la coherencia de estos, se les une la cantidad de recovecos y lugares que visitar que nos pondrán en un aprieto pero que terminarán beneficiado por sus recompensas narrativas o armamentísticas. Por cierto, olvidaros del tener a la mano un mapeado, aquí será investigar y memorizar. En definitiva, un magnifico el trabajo que han realizado.

En lo que se refiere a los enemigos, deciros que estos no son especialmente variados. Solo encontrando que poseen modificaciones especiales o algunos enemigos de gran tamaño que actúan como grandes jefes finales, pero que no terminan de tener un carisma especial, ni tampoco sobresalen por sus mecánicas.

Por último, dentro de la parte jugable, os tenemos que decir que el juego nos ha durado en torno a las veinticinco a treinta horas, siempre dependiendo del nivel de agilidad y de absorción del sistema de combate que tengamos, ya que a nivel de dificultad estamos hablando de un jugo bastante exigente, y donde morir no solo será normal, si no que nos servirá como ayuda a mejorar en las cientos de batallas que tendremos a cual más compleja.

Desde el punto de vista gráfico, nos encontramos ante un juego que posee más que potencia gráfica un muy buen trabajo artístico y de diseño de todo lo que nos rodea. Y es que el trabajo realizado especialmente con el diseño de personajes y de todos los enemigos es una verdadera delicia. Las armaduras, las armas, y cada una de las animaciones que veremos en pantalla se han llenado de mimo y buen hacer por parte de Deck13. Eso sí, los escenarios, pese a la buena ambientación y la buena cantidad de detalles que poseen sufren de texturas simples y de algunos que otros problemillas técnicos. Pese a estos pequeños problemas, hay que alabar el trabajo de optimización que este posee y la solidez en cuanto a rendimiento que nos brinda, esencial en un juego de estas características.

A nivel sonoro, la cosa es bastante destacada, y es que nos encontramos ante un juego que posee una interesante, aunque pocas veces suena, banda sonora de toque industrial. Y es que esta nos acompañará en ciertos momentos muy concretos, y el resto de momentos nos tendremos que acostumbrar a ese sonido ambiente que tan nervioso nos pone, y que tan genial le viene a esta tipología de juego donde la muerte está en cada esquina. A ello hay que añadirle unos buenos efectos sonoros, y un doblaje al inglés con unos correctos subtítulos a nuestro idioma.

NUESTRA OPINIÓN FINAL

-

En conclusión. Tenemos que dar la enhorabuena a Deck13 por el muy buen trabajo que ha realizado con The Surge. Habiéndonos traído uno de los que seguramente sea uno de los grandes tapados del año.

Entendemos que el juego no es perfecto y que posee ciertas aunque pocas cosas que mejorar. Pero como base jugable y como concepto Souls el juego es una maravilla. Posee un sistema de combate excelente, un control pulido, una ambientación impactante y un magnifico diseño de escenarios, que hace que se cubran los posibles defectos.

Dadle una oportunidad, ya que os aseguramos que nos os vais a arrepentir si os va eso de morir, morir y morir, y aprender de vuestra propia muerte.

-