'Anatomía de un incidente aislado' de Jordi Sierra i Fabra

Por Carmen F. Etreros

Anatomía de un incidente aislado de Jordi Sierra i Fabra. Bruño, 2010. 184 pp., 8.90€.
Por José R. Cortés Criado.
Un joven cambia de novia, de amigos y de vida; ahora se reúne con skins y como no quiere ser un “cagao” coge la pistola reglamentaria de su padre y sale a la calle con su pandilla a demostrar su valía.
Cuando despierta, está solo en medio de la noche, en un parque, y lo único que recuerda es un fogonazo, la cara asustada de un joven negro que está tirado en medio de la calle. No recuerda nada de lo que pasó, no sabe cómo llegó ese cuerpo a la calle, ni dónde están sus amigos, poco a poco los recuerdos vuelven y el miedo y la incertidumbre.
El joven asesinado llama a su amiga, con la que acababa de iniciar una relación estrecha esa noche, le dejó un mensaje desesperado en el contestador. Ella se teme lo peor y sale en su búsqueda, pide ayuda a su pandilla y comienzan una noche de angustia y desesperación hasta que lo localizan.
Conforme avanza la historia se va conociendo la identidad del chico negro, un antiguo niño soldado que vive con su hermano en Barcelona rehaciendo su vida, que trabaja y tiene amigos españoles; la del que aparece junto al cadáver, la de los skins.
Las indagaciones del policía encargado del caso, de la pandilla de jóvenes, la del hermano del fallecido, la del padre del principal sospechoso y de su antigua novia, nos llevan a velocidad de vértigo hasta el desenlace, que como ocurre en casi todas las obras de Sierra i Fabra, es totalmente inesperado.
Los lectores disfrutarán con este relato lleno de intriga donde todos son sospechosos y reflexionarán sobre la violencia, -conociendo la realidad de los niños soldados en África-; la de los jóvenes occidentales que se basan en cuatro ideas sin fundamento para considerarse superiores a otras personas; la relaciones paterno-filiales y en la amistad, como valor incuestionable en toda sociedad.