Los que esperaban un gran lanzamiento de Apple. Era su día, hoy la compañía de Cupertino tendría que resurgir y convertirse de nuevo en lo que fue otrora con los anteriores iPhone y el iPad. Pero ni un iPhone barato, ni un nuevo iPhone de alta calidad. Apple no ha conseguido absolutamente nada. Android ha vencido a Apple.
Al menos, eso es lo que podemos pensar cuando nos fijamos en el nuevo iPhone 5S. Se supone que debería ser un smartphone de gama alta, con una gran pantalla, con un gran procesador, con una gran batería. Pero no tiene nada de eso. O bueno sí, tiene un procesador de 64 bits, el primero del mundo en un smartphone, pero no deja de ser más que un dato de marketing que queda muy bien en una gran pantalla pero que se convierte en imperceptible en el día a día. El foco principal estaba puesto en la pantalla. Apple debía dejar atrás las cuatro pulgadas y pasar a competir de verdad con los smartphones actuales, pero no lo ha conseguido. Sigue con una pantalla de cuatro pulgadas. Pero bueno, igual había introducido una nueva batería con una autonomía increible, la batería de la que tanto se habló que Apple había estado creando. Y no, ni mucho menos, una batería con una autonomía inferior a la del Samsung Galaxy S4, que no destaca especialmente por su batería, todo hay que decirlo.
Tan solo innova algo con respecto a los anteriores smartphones en el detector de huellas dactilares, que no parece demasiado útil, salvo para descargar aplicaciones sin tener que poner la contraseña, así como en el segundo procesador que está siempre activo con monitorizando los sensores de movimiento, luminosidad, acelerómetros, etc. En realidad, es algo nuevo en Apple, pero no en el mundo de los smartphones, pues ya cuenta con ello el Motorola Moto X.
¿Y qué hay del iPhone 5C? Un terminal colorido, barato, que va a permitir que todo el mundo pueda comprarlo. Eso iba a ser. Pero tampoco es eso, para nada. Es un smartphone de 600 euros. Se dijo que por 300 euros sería un superventas. Se habló incluso de menos para dar un golpe de efecto al mercado. Los más realistas optaban por los 400 euros. Y como era de esperar, hoy ya se hablaba de algo más. Sin embargo, han sorprendido, sí, y para mal. Nada más y nada menos que 600 euros por un smartphone muy parecido al que lanzaron hace un año. ¿Qué tipo de broma es esta? Lo único que han incluido es una carcasa de colores y unas fundas. Y por cierto, las fundas se pagan aparte.
Por otro lado, también vemos cómo Samsung ha lanzado un nuevo reloj inteligente, el Samsung Galaxy Gear, y Apple no ha tenido respuesta para esto. Y para colmo, están los phablets. Sony tiene el Xperia Z Ultra, de 6,3 pulgadas. Huawei el Ascend Mate de 6,1. HTC estaría fabricando el suyo propio, y Samsung acaba de lanzar el Note 3. Apple tampoco ha lanzado un phablet.
Ni un buen precio, ni novedosas características. Las acciones de Apple caen, mañana seguirán cayendo mientras escribimos nuevas noticias. Y por mucho que lo hayan intentado, desde que murió Steve Jobs la compañía de Cupertino no ha conseguido innovar en el mercado. Lo único que han conseguido es llegar a China. Y encima han dejado España en la segunda fila para el lanzamiento del smartphone, que llegará en diciembre, y no este mes. Sin duda, Google, Android y los fabricantes que crean smartphones con este sistema operativo, han conseguido desbancar a Apple y dejarlo de lado. Es increible, porque además gran parte de la culpa es de Apple, que podría haber mejorado mucho en estos años, solo tendría que haber hecho caso a lo que les decían miles y miles de usuarios.
Fuente directa: http://goo.gl/MRWOUi
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