Anemia ferropénica: la “sangre cansada”

Publicado el 18 junio 2014 por Femeniname

Alguna vez te has encontrado muy cansada, sientes que cuando llegan las últimas horas del día ya no puedes hacer nada más, te encuentras un poco mareada y débil, duermes mucho y no descansas nada… Tal vez tengas anemia ferropénica, la enfermedad de “la sangre cansada”.

 

Anemia significa ausencia de sangre. La hemoglobinma transporta oxígeno por la sangre y cuando no existe cantidad suficiente de hierro, dismunuye la cantidad de hemoglobina, lo que causa que los tejidos y órganos no reciben cantidad suficiente de oxígeno para darles energía.

En las mujeres este problema es bastante frecuente, sobre todo en los casos de menstruación abundante, también se añade el riesgo de la reducción de los depósitos por las dietas estrictas y el embarazo. Aunque también puede deberse a toda una serie de dolencias como úlcera sangrante, hemorroides… Acudir a nuestro médico y hacerse un análisis de sangre rutinario es la mejor forma de protegerse contra la anemia.

Una vez detectada, lo más probable es que el médico recomiende suplementos de hierro durante un tiempo, además comer una dieta rica en hierro también puede ayudar a evitar este problema, aunque es muy importante tener en cuenta la calidad del hierro que se ingiere. Esto se debe a que el hierro existe en dos formas: forma hem, que se absorve con mayor facilidad y no hem. Además como ya comentamos en alimentos ricos en hierro algunas combinaciones y componentes de alimentos pueden obstaculizar la capacidad que tiene nuestro cuerpo de absorber hierro.

Estos son unos SENCILLOS CONSEJOS dietéticos para ayudar a mantener el equilibrio del hierro:

  • Ingerir carnes magras, que son la principal fuente de hierro en forma hem e ingerir junto con estas carnes, verduras, legumbres y cereales. La combinación de las carnes magras junto con estos alimentos estimula la absorción del hierro.
  • Tener cuidado con el efecto del calcio, té o café porque pueden inhibir la absorción del hierro.
  • Combinar alimentos ricos en hierro con alimentos ricos en vitamina C. Por ejemplo, beber un zumo de naranja con una comida rica en hierro puede duplicar la cantidad de hierro que absorbe el organismo.