Ángeles Desterrados

Publicado el 03 diciembre 2012 por Poy

¡Hola a todos!  Otra vez vuelvo a traer una de esas reseñas que tengo pendiente desde hace mil. Esta novela tardé mucho en leerla ya de por sí, y encima tengo la reseña cogiendo polvo en el ordenador desde el verano pasado. Creo que por este blog ya conoceréis la novela, puesto que entrevistamos a la autora cuando el libro iba a salir a la venta. De hecho, creo que Anabel incluso llegó a venir a Sevilla y no pude ir a la presentación. Espero que os guste la reseña.
Título: Ángeles Desterrados Autor: Anabel Botella Editorial: Nowevolution Precio: 15€ Páginas: 256 Sinopsis: Hay amores que son inmortales, que traspasan todas las barreras del tiempo y del espacio. Keilan lo sabe. Ha esperado a María durante siglos. Ahora dispone de una semana para que ella recuerde quién es… quiénes son: Ángeles desterrados sobre los que pesa una terrible maldición.
Desde que esta novela salió a la venta tenía muchas ganas de leerla. La verdad es que sigo el blog de Anabel Botella prácticamente desde que entré en el mundo de la blogosfera y me alegré mucho de que le fuesen a publicar su primer libro. Además, por norma general me suelen gustar mucho sus reseñas, tanto por los puntos negativos que les saca a determinadas novelas como por los positivos. Me parecen unas reseñas muy cabales y muy argumentadas. Pero volviendo al libro, tengo que decir que no ha sido todo lo que yo esperaba, y que si bien me ha gustado, tiene unos fallos que no pensaba encontrarme en Ángeles Desterrados.
Antes de comenzar la novela ya sabes que no vas a encontrarte con algo increíblemente original que no haya escrito otro autor anteriormente. De hecho, la autora nos deja una nota antes de comenzar en la que dice: “Si algo tenía claro al empezar a narrar es que quería que parte de los lugares de esta novela fueran sitios con un toque diferente a lo que he leído en otras novelas. También tengo claro que no he inventado nada[...]”. Tengo que decir que a mi modo de ver, ambas cosas son ciertas.
En esta novela nos encontraremos con esa repetida historia en la que un chico sobrenatural conoce a una chica que, aunque a primera vista parece normal, no lo es del todo. Y ambos vivirán una historia de amor que les llevará incluso a las puertas de la muerte. Lo malo que tienen este tipo de historias es que desde que abres la primera página ya puedes adivinar qué es lo siguiente que va a pasar en el libro, y nada te sorprende. Incluso aparece la típica pelea irracional hacia la mitad del libro. Por supuesto, esto no significa que esta novela no se disfrute; en los pequeños detalles que ha ido incluyendo Anabel Botella en la historia está la magia de ésta.

Anabel Botella, la autora.

Los espacios en los que discurre la acción de la novela son, como la autora dice en la nota al comienzo del libro, diferentes. La historia tiene lugar en pueblos españoles, desde Murcia con dirección a Madrid. Todos los espacios que visitan nuestros protagonistas se hacen muy cercanos, muy reales. Es fantástico ver nombres como Coque, Paco o Antonia protagonizando la novela, así como las comidas típicas de los pueblos o las palabras propias de cada zona. Así que podría decir que en cuanto a los espacios terrenales estoy satisfecha. Aunque más me han llegado a gustar los espacios “celestiales”, esto es, Siric-Antiac, el reino donde viven los ángeles. Esta es una de las partes que más me han gustado, y hubiese estado encantada de leer más sobre él y de que esta parte se hubiese desarrollado más. Es un sitio que evoca paisajes oníricos, que permite que dejes volar tu imaginación. Por algún motivo, me recordó a Pandemónium, el lugar donde van las sombras en Los Incorpóreos, la trilogía de Ana Ripoll, otro lugar que me encantó visitar.
En cuanto a los personajes principales, y ahí es cuando digo que esperaba otra cosa, me han parecido completamente estereotipados y me han decepcionado. Al comienzo de la historia, María se presentaba como una chica muy peculiar: es una muchacha gitana de dieciséis años que quiere estudiar, a lo que su familia de opone. Además la llaman la Bruja Azul, por el color de sus ojos, y tiene el pelo entre dorado y pelirrojo. Lo dicho, un personaje curioso. Pero conforme pasas las páginas te encuentras con la misma chica que ya has conocido en las otras miles de historias por el estilo: al principio de siente atraída por el chico, pero se resiste; luego se deja llevar y viven unos momentos maravillosos, aunque más tarde se separan por motivos irracionales, para culminar en una magnífica reconciliación. Poco a poco te das cuenta de que esas peculiaridades que tanto llamaban la atención en María resultan prácticamente irrelevantes en la trama. Así, ella es la chica guapa que se siente insegura y él, Keilan, el chico perfecto que está enamorado de ella. Por lo menos no es una historia de amor a primera vista. Es verdad que ambos protagonizan buenas escenas, y que tienen algunos diálogos muy buenos, pero por norma general no he encontrado en ellos nada novedoso. Por otra parte están los personajes secundarios y los antagonistas. Aquí sí que he quedado satisfecha. Muchos son los personajes que van a tomar parte en la novela: Marta, Llanos, Nitya, Grunontal, Yunil, Milkaer... Todos con una historia que contar y un papel en la trama. Personalmente me quedo con Nitya y Grunontal, y con las escenas protagonizadas por ellas.
La parte fantástica de la novela, es decir, la maldición y los ángeles, demonios y vampiros que aparecen por doquier, también me han dejado con un buen sabor de boca. La autora juega mucho con los intereses de todos estos personajes y acabas por no saber quién es el bueno y quién el malo (que mareo me dio Chantal... y no, esto no es un spoiler).También quedó bastante bien la escena de la batalla final, y aunque me hubiese gustado que la autora se explayase más en ella y menos en los protagonistas y su relación, no puedo negar que me encantó.
Tengo que comentar que aunque los libros de esta editorial no tienen unas ediciones especialmente llamativas (o por lo menos los que yo he leído), la de este libro me ha gustado. La portada es muy vistosa, pero además aparece en una segunda hoja en blanco y negro. Pero lo que me ha gustado en realidad es el tamaño de la letra. Últimamente me da la sensación de que en las novelas la letra es demasiado grande, y las historias de 500 páginas realmente serían 300 si les pusiesen un tamaño más adecuado. Esto lleva a dos cosas: una, el libro es más gordo y no cabe en ningún sitio y dos, te clavan 20€ y tú te vas tan a gusto pensando que la novela es un tocho y lo vale; pero en dos días la has terminado. Supongo que esto es un efecto secundario tras la lectura de Os gustará esto. (Como a todos).
En resumen, aunque Ángeles Desterrados no destaca por la originalidad de su argumento sí que lo hace por la originalidad de sus espacios, tanto los reales, como son ciertos pueblos españoles, como por los ficticios, es decir, la ciudad de los ángeles. Muchos de los diálogos tienen esas palabras tradicionales que se usan en ciertas zonas que le dan más realismo a la historia y es genial ver cómo un vampiro puede llamarse Coque. Aunque la pareja protagonista no ha sido santo de mi devoción, el resto de personajes que completan el elenco sí que se han ganado mi simpatía, en especial Grunontal y Nitya. Espero que Anabel Botella vuelva a publicar algo más (con otros protagonistas, por Dios xD) y así poder disfrutar otra vez de sus historias.
¿Y vosotr@s? ¿Habéis leído el libro? ¿Lo pensáis hacer? ¿Estáis de acuerdo con mi reseña? ¿No? ¿Por qué? ¡Nos leemos!
Poy